Imaginemos que la planta no se ve y que no vuelca ni una sola gota de agua al río como efluente. Es decir, que no hay contaminación. Cientos de miles de hectáreas plantadas de eucaliptus requieren riego, el agua que tome Botnia del río Uruguay, en vez de regresarla (contaminada o no, no es el tema), la puede bombear para uso de riego. Un santuario ecológico puede instalarse en el centro del río, en posición estratégica para cubrir la vista de la planta, gestionado por Greenpeace y/o el ministerio de Picolotti. Puede ser un parque temático-ecológico que sea además atracción turística para el balneario de Gualeguaychú.

Falta voluntad, sobran ideas.

Simone Anderlech

DNI 18.538.097