“Má’termínenla con Ruggeri”, se hartó ayer Julio Grondona, después de que Diego Maradona se mimetizara con Barack Obama para mandarle un mensaje por elevación a favor de la contratación del polémico ex zaguero. “Lo de Ruggeri está resuelto –sentenció Grondona con el aplomo de quien acostumbra ponerle punto final a las discusiones–. Yo expuse lo que pensaba, ellos me escucharon y listo. No hay más nada que hablar.”

Maradona se comparó el martes con el flamante presidente de los Estados Unidos al reclamar la contratación del controvertido entrenador, quejándose de que “Obama eligió lo que quiso (para su gabinete) y a mí no me quieren dar a Ruggeri”. Grondona le recordó claramente ayer quién manda en la AFA al agregar que “el viernes (Maradona y Carlos Bilardo) van a decir que el tema de Ruggeri ya está superado y anunciarán el plantel definitivo” para el amistoso contra Francia. Maradona había dicho que el viernes era la fecha tope para contratar al ayudante que ya no lo será.

Rápidamente, Bilardo cerró filas con el mandamás de la AFA. “Yo ya he jugado todas las cartas –sostuvo–. Hay que darle un corte a la situación. Yo he dicho que hasta aquí llegamos”, sentenció el ex entrenador con palabras que seguramente no le han de agradar a Maradona, que quedó solo con el reclamo y resultó derrotado en esta puja. “El tema está cerrado y no hay ninguna posibilidad de que se sume al cuerpo técnico”, remachó el dirigente.

Humberto Grondona, técnico de Talleres e hijo del presidente de la AFA, artífice de la llegada de Maradona al seleccionado y de la articulación de Bilardo al cuerpo técnico, aseguró que “la llegada de Ruggeri es difícil de destrabar”. Grondona había tenido declaraciones muy duras contra Ruggeri en una nota publicada por El Gráfico en diciembre, pero más tarde moderó su posición y le abrió una puerta al ex entrenador de Independiente y San Lorenzo.

Ahora, sin embargo, se rindió ante la posición irreductible de Rafael Savino, el presidente de San Lorenzo e integrante del Comité Ejecutivo de AFA, que no quiere a Ruggeri en el seleccionado después de que éste pidiera la quiebra del club a raíz de una deuda de la época en que fuera el técnico, un período que terminó en diciembre de 2006.

Después de mucha insistencia, Ruggeri se reunió el mes pasado con Grondona, al que le pidió disculpas por antiguas críticas. La semana pasada siguió su periplo de contrición y fue Savino quien lo escuchó. pero el presidente sanlorencista no dio marcha atrás. Ayer Grondona volvió a blandir el hacha: “Ahora el que no lo quiere soy yo. Que deje en paz a la gente. ¿Qué pretende? No tiene lugar en la Selección. Si yo no te quiero invitar a comer a mi casa vos no te podés arrastrar tanto y comprometer a mucha gente para tratar de que te invite”.

Está claro. Oscar Ruggeri no trabajará con la Selección.