Juan Román Riquelme finalmente no jugará para Boca mañana ante Defensor Sporting el partido de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores y su lugar será ocupado por Nicolás Gaitán. La ausencia de Riquelme, que sigue sin recuperarse de la fascitis plantar que lo marginó de los partidos desde el 9 de abril, se confirmó ayer por la mañana en el entrenamiento realizado en Casa Amarilla. Más tarde, Riquelme habló por Radio ESPN Rivadavia y trató de tranquilizar a los hinchas, luego de rumores sobre desencuentros entre el técnico Ischia y el manager Bianchi: “La gente tiene que estar tranquila, porque tenemos la suerte de contar con Bianchi haciendo su trabajo, que nos ayuda mucho. Ellos se conocen hace más de diez años y están muy bien. Nosotros no podemos salir a desmentir todos los comentarios”.

Riquelme sintió dolor sobre el final de la práctica del lunes pasado y por ello los cuerpos técnico y médico optaron por reservarlo para la revancha ante los uruguayos. El volante había vuelto ese día a hacer fútbol, pero el contacto con la pelota duró muy poco. La idea es que reaparezca en el partido del domingo próximo frente a Arsenal.

De esta manera, la probable formación será con Abbondanzieri; Ibarra, Cáceres, Forlín, M. Rodríguez o Krupoviesa; Vargas, Battaglia, Chávez; Gaitán; Palacio, Palermo. Los otros futbolistas que quedaron concentrados son Ayala, Roncaglia, Sauro, Díaz, Benavídez, Gracián, Mouche, Figueroa y Viatri.