“Ganar no es lo único que interesa, pero es importante para que no se nos complique el futuro”, reflexionó ayer el técnico de Boca, Claudio Borghi, en referencia al encuentro que sus dirigidos disputarán mañana en Bahía Blanca, ante Olimpo. Lejos de volver a ponerse presión, el entrenador destacó que el partido “no será a todo o nada”, pero que Boca deberá ganar. A la hora de analizar el pobre presente de su equipo, Borghi realizó una autocrítica sincera: “No podemos plasmar en la cancha lo que hacemos en el entrenamiento, eso es lo que preocupa”.

Sin esconder sus defectos, el técnico admitió que a su equipo le falta “juego”, debido a que no puede crear todas las situaciones de gol que quisiera. Y ese déficit lo atribuyó a la falta de pausa en la zona de generación de juego. “No podemos tener la pelota lo suficiente. Cuando no nos salen las cosas, deberíamos dominar un poco más la pelota, pero nosotros somos un equipo de ida y vuelta. No tenemos pausa”, se lamentó. Dentro de esa órbita, el entrenador destacó la labor de Chávez, pero señaló que no es un jugador con capacidad para bajarle el ritmo a la ofensiva: “Al no tener pausa, debemos poner algunas variantes que nos permitan atacar un poco más. Eso no lo encontramos. Pochi (por Chávez) no lo ha hecho mal, aunque no es un diez clásico para la pausa. Pero no quiero ser injusto con él”.

Al destacar los puntos altos de Boca, Borghi consideró que el partido frente a Vélez fue “el mejor”. “Contra San Lorenzo terminamos con un hombre menos y tratando de hacer goles, de lograr aunque fuera el empate. El segundo gol lo recibimos del contragolpe de una jugada en que cabecea un central nuestro. Estábamos jugados en ataque”, analizó el entrenador.

De cara al encuentro de mañana, el técnico mantiene dos dudas en el equipo titular. Cellay se resintió del esguince de tobillo derecho que sufrió frente a San Lorenzo y su lugar lo podría ocupar Marín, mientras que Giménez y Escudero son los dos posibles candidatos para ocupar el carril izquierdo, aunque el ex Tigre cuenta con más chances de integrar la nómina inicial.