Newell’s ganaba y dominaba el trámite, pero Quilmes no bajó nunca los brazos y aprovechó una jugada de pelota parada para marcar la igualdad, y en el último tramo hasta hizo méritos como para ganarlo. Formica anotó para los rosarinos; Gerlo lo hizo para la visita. Le anularon mal un gol a Caneo.

El partido tuvo un arranque prometedor, porque ambos equipos mostraron decisión para ir al ataque, aunque sin demasiada claridad en la zona de definición. Pero el ida y vuelta lo hizo entretenido. De a poco, los rosarinos comenzaron a dominar a partir del buen trabajo de sus volantes y entonces consiguieron arrimar peligro al área rival.

Formica, una de las figuras del miércoles pasado en la goleada ante San José de Oruro por la Copa Sudamericana, no tardó en marcar diferencias y Newell’s se puso a tiro de la apertura del marcador. Vella probó con una volea desde la puerta del área, pero encontró atento al arquero Trípodi.

Quilmes no quiso quedarse con las manos vacías, pero cuando se adelantó para ir a buscar la victoria, Newell’s sacó provecho de los espacios y se volvió muy peligroso en los contraataques. Bernardi casi moja en una jugada que arrancó en la mitad de la cancha luego de un error de los dirigidos por Hugo Tocalli, y que el mismo definió con un remate que se estrelló en el travesaño.

Pero la frustración duró poco. En otro ataque contundente, Formica ingresó al área por un costado con la pelota dominada y sacó un violento remate cruzado que se coló por entre las piernas del arquero de Quilmes para poner, a los 29 minutos, el partido 1-0.

Quilmes reaccionó bien y se lanzó otra vez al ataque, tratando de minimizar el golpe de los rosarinos. Así logró que los locales se retrasaran un poco en el campo de juego.

Raymonda casi anota el empate en el arranque del complemento, pero después los rosarinos volvieron a marcar su dominio y a exigir al arquero Trípodi, con un remate de Sperdutti y un cabezazo de Borghello.

No se amedrentó Quilmes, que siguió buscando el empate. Y tanto se esforzó que, en jugada de pelota parada, encontró finalmente la igualdad. Fue tras una muy buena ejecución de Broggi, quien envió un centro al segundo palo, donde Gerlo conectó con la derecha y la empujó para el 1-1. Enseguida Caneo tuvo la victoria en sus pies, pero el árbitro le anuló mal el gol por posición adelantada milimétrica. El volante había partido en la misma línea que Fideleff. El final fue intenso. Schiavi se fue expulsado por empujar a Gerlo. En la jugada siguiente, a los 89, Beligoy cobró una mano de Vella en el área y fue penal para Quilmes, que festejó por adelantado. Ejecutó Varela, abajo a la izquierda, y atajó Peratta para dejar las cosas como estaban.