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Guillermo Coria y Agustín Calleri definirán hoy el torneo Master Series de Hamburgo, tras una jornada histórica para el tenis argentino, que por primera vez colocó a cuatro jugadores en las semifinales del torneo que otorga puntos para La Carrera de Campeones y el ranking mundial. Coria –-16º jugador del mundo antes del comienzo del torneo– se consagró finalista de este torneo con premios por 2.450.000 euros, al vencer a Gastón Gaudio por 6-3, 6—7 (3-7) y 6-0, y definirá hoy el título ante el sorprendente cordobés Agustín Calleri, quien batió a su coprovinciano David Nalbandian –13º en el arranque de Hamburgo–, por 6-4 y 6-1.
El talentoso Mago santafesino superó por tercera vez a Gaudio (29º), a quien ya había vencido en la final de Viña del Mar 2001 y en la Copa AT&T de Buenos Aires en febrero último, mientras que perdió en una ocasión, en el torneo de Buenos Aires 2001. El partido terminó, tras dos sets peleados –sobre todo el segundo– con un categórico 6-0 para Coria. Fue un duelo personal, como siempre entre ellos, con un tono de disputa casi callejera por las discusiones y reclamos, incluidos los gestos. Coria, con problemas de calambres al final del segundo set, después de ser atendido se recuperó y arrasó con un Gaudio que, como otras veces, se quebró en determinado momento y comenzó a jugar erráticamente, cometiendo muchos errores no forzados mientras el ganador era una máquina de jugar.
Coria conectó dos aces y 33 winners (tiros ganadores) y cometió 26 errores no forzados, mientras que el tenista de Adrogué acertó con un ace, tuvo 25 tiros ganadores, y 38 errores no forzados, la mayoría en el funesto tercer set.
Coria dominó en el primer set, que ganó por 6-3, pero sufrió un bajón en el segundo, en el que se mostró mejor Gaudio y pese a lo ajustado que fue el marcador, se llevó con justicia el parcial en el tie-break que lo favoreció por 7-3. Lo mejor del repertorio de Coria apareció en el tercer y definitivo set, cuando dejó de lado una contractura en la pierna derecha y sus quejas por algún fallo del árbitro, y prácticamente no le dio chances a Gaudio, puesto que le quebró tres veces el servicio, se puso5-0 y definió en el primer match point que tuvo. El ganador, que había superado sin ceder ningún set en las rondas previas al estadounidense Vincent Spadea (33), al finlandés Jarkko Nieminen (35), al ruso Mikhail Youzhny (32) y al australiano Mark Philippoussis (67), acabó con las ilusiones del Gato Gaudio, que se desmoronó una vez más.
Además, y lo que acaso sea más importante, el Mago de Rufino –que perdió este año dos finales, en Buenos Aires y el Masters Series de Montecarlo ante Moyá y Ferrero respectivamente–, con el acceso a la final de hoy se aseguró un lugar entre los diez mejores del mundo, puesto que desde el lunes él también será top-ten, junto a Nalbandian.
Por su parte, Calleri, quien atraviesa el mejor momento de su carrera profesional y está ubicado en el puesto 31 del ranking, destrozó en dos sets al top ten Nalbandian. Fue clara muy la victoria que logró el cordobés, quien jugó un tenis potente e impecable y logró su segundo triunfo al cabo de seis enfrentamientos sobre Nalbandian en apenas una hora y 19 minutos de partido. El ayer vapuleado unquillense tenía récord favorable, ya que había superado a Calleri cuatro veces –este año en Scottsdale; en Basilea y Roland Garros 2002 y en el Challenger de Venecia del 2001– mientras que había caído sólo en la final de la etapa de la Copa Ericcson de Buenos Aires en diciembre de 2001.
Sin embargo, ayer fue otra historia la historia fue distinta. Calleri estuvo acertado con su saque (conectó cinco aces) e hizo diferencias en la cantidad de winners, 32 contra 20 de Nalbandian, quien cometió 21 errores no forzados, casi todos en el último set que perdió claramente por 6-1. Así, el silencioso Gordo Calleri, que esta temporada consiguió su primer título ATP en Acapulco, disputó la final de Estoril y la semifinal de Barcelona, mantiene en lo que va del año un récord de 23 victorias y 7 derrotas sobre polvo de ladrillo, y hoy va por su primer título grande.
En su camino a la final, el tenista nacido en Río Cuarto venció sucesivamente al coreano Hyung Taik Lee (57), al estadounidense Andy Roddick (6), a Mariano Zabaleta (38), al sudafricano Wayne Ferreira (26) y ayer a su coterráneo. Nalbandian, pese a la derrota, se lleva de Hamburgo la enorme satisfacción de saber que desde mañana volverá a ser top-ten, puesto que quedará séptimo en el ranking mundial, la mejor ubicación de un tenista argentino desde la época de Guillermo Vilas y José Luis Clerc. También es inédito desde aquel tiempo el hecho de que sean dos los topten argentinos: Nalbandian y Coria. Un detalle más para hacer inolvidable este certamen de Hamburgo.