Newell’s no pudo de local frente a Atlético Nacional de Medellín, que lo derrotó por 3-1 y le quitó el que era su pasaje a los octavos de final de la Copa Libertadores. Los rosarinos quedaron, finalmente, en la tercera posición del Grupo 6 (con 8 puntos), detrás de Gremio (primero, con 14), que ayer derrotó como local a Nacional (1), y de los colombianos (10).

El partido arrancó mal para ambos equipos. Una disputa menor terminó con la expulsión de López, en el local, y Cardona, en el conjunto visitante. No terminaba de digerir Newell’s la noticia cuando Guzmán, en una jugada que entrará en compactos de las malas decisiones de los arqueros, recibió un pase atrás de Villalba e intentó salir jugando ante la presión de Tréllez, pero éste le punteó la pelota y sin decir agua va puso el partido 1-0. Era una noche fatal para el conjunto de Alfredo Berti y eso se explicitó cuando, a los 13, en una contra que arrancó tras un tiro de esquina a favor de los locales, los colombianos contaatacaron rápido y tras un desborde por la izquierda y un centro atrás, Cárdenas tomó la pelota y sacó un remate cruzado al que no llegó Guzmán para poner el 2-0.

Ese parecía ser el golpe de nocaut para Newell’s, que para colmo venía de perder en el mismo escenario el clásico ante Central por el torneo local, pero no fue así. El equipo de Berti metió el pie en el acelerador y tras una buena combinación entre Figueroa y Casco, encontró el descuento apenas dos minutos más tarde. Fue el propio Casco el que definió perfectamente ante la salida del arquero Martínez.

Tras el descuento, Newell’s entendió por dónde atacar a los colombianos para hacerles daño. La puesta era abrir la cancha y buscar fortuna por arriba, y el asunto marchaba bien hasta que Newell’s recibió otro golpe: Maxi Rodríguez sintió un pinchazo y pidió el cambio. Poco después, Valencia se perdió el tercero para Atlético Nacional, con un remate frontal apenas desviado.

Los segundos 45 fueron dramáticos para los rosarinos. A los 55, el ingresado Berrío aprovechó una salida apurada de Guzmán y anotó el 3-1 de emboquillada. A partir de ahí, Newell’s buscó el descuento desesperadamente (lo tuvo Trezeguet, dos veces y lo tuvo Figueroa) ante un rival que defendió su ventaja con inteligencia –buen trabajo de Cárdenas– y buenas intervenciones de su arquero Armani.