La Mar del Plata basquetbolera no durmió por culpa de Peñarol. Es que el conjunto milrayitas venció 4-2 en la serie final de la Liga Nacional a Regatas y se coronó campeón por quinta vez en su historia y por cuarta en los últimos cinco años. De esa manera despidió de manera perfecta a Facundo Campazzo, la gran figura del campeón, que seguirá su carrera en el exterior tras la disputa del Mundial de España.

“No me salen las palabras de agradecimiento para todos, para la gente y mis compañeros. Este equipo se merecía salir campeón y por suerte lo logramos”, expresó un emocionado Campazzo, que salió con lágrimas en los ojos a 40 segundos del final, cuando el entrenador Fernando Rivero lo reemplazó para la ovación de su gente. “Lo que jugó el equipo en el segundo tiempo fue tremendo y gracias a la fuerza que le pusimos pudimos salir campeones”, indicó el jugador más valioso, que terminó el partido con 32 puntos, 20 de ellos en el último cuarto, y seis asistencias.

El entrenador Rivero, debutante en el cargo, también se mostró emocionado por la conquista. “Antes de empezar la Liga, era impensado que lográsemos el título. Jamás pensé que iba a tener este desarrollo y este final”, señaló Rivero, que tuvo palabras de elogio para Campazzo. “Es una bomba atómica. El tuvo la suerte de estar en el momento justo y en el momento indicado. Encontró a Sergio Hernández y a Leo Gutiérrez. Es una esponja que absorbe todo, fue un genio y él se va a poner su techo porque tiene una mentalidad ganadora”, afirmó sobre Campazzo.

Con su décimo título en la mano, Leo Gutiérrez prometió más: “Prometo lograr más títulos. Por la gente que siempre nos bancó y por la dirigencia que siempre creyó en este proyecto”. Por historia, habrá que creerle.