Boca ya conoce los primeros rivales que tendrá en la próxima Copa Libertadores, su gran objetivo para 2016. Bolívar –un viejo conocido del club de la Ribera en los torneos continentales que trae la dificultad de tener que ir a jugar a la altura de La Paz–, Deportivo Cali, el subcampeón colombiano, y Racing o Puebla (México) son los integrantes del Grupo 3. Con ellos deberán lidiar Rodolfo Arruabarrena y sus muchachos para obtener uno de los dos lugares en la fase de octavos de final.

El sorteo del martes a la noche en Luque (Paraguay) motorizó las expectativas en cuanto a los refuerzos que Boca sumará para hacer frente a una temporada con un calendario que prevé un primer semestre de mucha actividad. Además de la Libertadores, el Xeneize deberá afrontar el torneo de Primera División –que arrancaría el 7 de febrero y concluiría a fines de mayo y tendría al menos una fecha a jugarse entre semana–. A esto hay que agregar que algunas de las figuras que integran el plantel (Tevez y Lodeiro, entre ellos) seguramente serán convocadas a las selecciones nacionales para jugar los partidos programados por las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Rusia y tal vez otros partidos de preparación para la Copa América del Centenario, el torneo que los representativos de los países nucleados en la Conmebol disputarán a mediados de año en Estados Unidos.

Puestos manos a la obra, los dirigentes de Boca tienen acordadas de palabra las incorporaciones de Daniel Osvaldo y de Jonathan Silva, ambos provenientes del fútbol portugués. El delantero tendrá su segunda oportunidad en el club, luego de una salida en medio de escándalos relacionados con su vida fuera de las canchas. Osvaldo arribó al país en los primeros día de la semana y le comentó a los directivos boquenses que instruyó a su representante para que gestione su salida del Porto (en el que tampoco revistaba como titular), de modo que pueda cumplir el viejo sueño de jugar con la camiseta azul y oro junto a su amigo Carlos Tevez. En pos de hacer realidad esta ilusión, el jugador nacido en Huracán estaría dispuesto a resignar dinero y a aceptar un contrato con cláusulas muy especiales que Boca le impondría. Entre ellas, que el club determine su lugar de residencia, la prohibición de mostrarse fumando y de concurrir a boliches y recitales, disposiciones muy comunes en Europa pero poco implementadas en Argentina.

El pase a préstamo hasta mediados de 2016 de Silva, marcador lateral izquierdo elegido para ocupar el lugar que deja en el plantel Fabián Monzón (culminó su préstamo y volvió al Catania), también está acordado, a pesar de algunos idas y vueltas relacionados con la fijación de la opción de compra y el monto de la misma. Sin embargo, el acuerdo entre Boca y el Sporting Lisboa –club en el que se desempeña el jugador salido de Estudiantes– estaría completado y el lateral llegaría sin cargo y sin opción.

Para completar el plantel, Arruabarrena desea incorporar un marcador central y otro delantero. Para el primer lugar el apuntado es Lucas Orban, actualmente en Valencia de España. El Vasco lo pretende, entre otras cosas, porque puede jugar de central y también marcando la punta izquierda. El plan B es otro ex River. Se trata de Leandro González Pirez, quien ya tuvo en manos del técnico en su recordado paso por Tigre. Claro que en el caso de este jugador, Boca tiene un competidor, pues sería pretendido por Sava para incorporarlo a Racing.

En cuanto al delantero, ni los dirigentes ni el técnico han dado nombres. Ese silencio fue roto por Carlos Tevez. El ídolo boquense dijo que le gustaría mucho que llegue a Boca Ramón “Wanchope” Abila. Y se sabe que a veces la palabra de los ídolos tiene un peso decisivo. De todos modos, el arribo de un atacante estaría atado a la continuidad o no de Sebastián Palacios. Hay ofertas por el juvenil y todos dudan acerca del camino a tomar, pues cuando fue tenido en cuanto el chico que estuvo a préstamo en Arsenal respondió con goles.

Así como llegan jugadores hay otros que ya arman las valijas. Los más conocidos y los primeros en dejar la Boca fue Jonathan Calleri y Fabián Monzón. A ellos se sumaría en las próximas horas Nahuel Zárate, que jugó a préstamo en Godoy Cruz en el campeonato pasado y cuyo representante negocia la rescisión del contrato que lo une a Boca hasta mediados del año próximo para colocarlo en otro club. Quien regresó y tampoco integraría el plantel sería Luciano Acosta. El juvenil cumplió buenas actuaciones en Estudiantes y la idea es cederlo nuevamente a préstamo.