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Los mundiales de fútbol organizados cada cuatro años por la FIFA traen cada vez más dinero a las arcas de la federación, según reconoció en Munich su secretario general, Urs Linsi. Hasta el Mundial del 2010 en Sudáfrica, la FIFA prevé que los ingresos por la comercialización de la Copa del Mundo aumenten en unos 3640 millones de dólares.
Linsi afirmó que desde el Mundial de 1998, en Francia, los ingresos por los mundiales, teniendo en cuenta el de Alemania 2006, se han multiplicado por diez, pasando de 210 a 2180 millones de dólares. Por el contrario, la FIFA tiene sólo gastos por 675 millones de dólares. Según el responsable de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, para el Mundial del 2010 en Sudáfrica se esperan todavía mayores ingresos por derechos de retransmisión televisiva que en el 2006.
El secretario Linsi afirmó que la FIFA ya consiguió atraer a tres de los seis patrocinadores globales que deben comercializar el Mundial junto con la organización. La FIFA ya formó contratos con las multinacionales Adidas, Hyundai y Sony hasta el 2014.
Durante el congreso organizado en Munich se discutió también el tema de la seguridad en el fútbol de cara al Mundial del año próximo. “Nosotros no tenemos fuerza policial, pero sería bueno que cada país aporte su propia estructura de seguridad”, se le escuchó decir a Blatter. Nosotros haremos todo lo posible para que no ocurra nada, pero nadie puede garantizar el ciento por ciento de seguridad”, afirmó Franz Beckenbauer, presidente del Comité Organizador de la Copa del Mundo.
Beckenbauer y Blatter coincidieron también en la necesidad de establecer en cada equipo de Liga un tope de cinco jugadores extranjeros o no comunitarios. Blatter reconoció que son sobre todo los clubes más “ricos” los que se niegan a aceptar el tope. “Tienen tantos jugadores en el banco como en el campo de juego, simplemente para evitar que éstos jueguen en otro equipo”, dijo. “Cuando se tiene un 90 por ciento de extranjeros en un equipo, no es gracioso”, aseveró Beckenbauer.