Jueves, 26 de enero de 2006 | Hoy
Guillermo Coria atraviesa uno de los momentos más decepcionantes de su carrera. Cambió de entrenador para buscarle una solución a su problema de saque.
La semana que viene estará fuera del top-ten del tenis mundial, pero eso es lo menos doloroso que Guillermo Coria siente en este momento. El chico de Venado Tuerto que en el 2005 se había propuesto la meta del esfuerzo para llegar a ser el número 1 atraviesa una crisis en su carrera deportiva, no tiene entrenador y hasta entiende las razones por las cuales no forma parte del equipo argentino de Copa Davis, la formación que siempre dijo se desvivía por integrar. “Este no era el momento de citar a Coria, ya que afrontaría una serie de Copa Davis con demasiadas presiones. Es difícil jugar en casa y dada su actualidad, no era la ocasión para integrar el equipo”, afirmó ayer el capitán argentino de Copa Davis, Alberto Mancini, quien agregó que la decisión fue tomada por consenso con el jugador.
“Quiero aclarar que Coria no se autoexcluyó, tuvimos una charla de igual a igual que resultó muy buena y entre los dos tomamos la decisión. Me incliné por el buen momento que atraviesa Chela, pero a lo largo del año uno como capitán agregará y sacará jugadores, el equipo cambia”, añadió Mancini.
En Melbourne, tras la derrota en tercera ronda ante el francés Sebastien Grosjean, un partido en el que el argentino cometió 23 dobles faltas, Coria conversó con Mancini en la Sala de Jugadores del Abierto de Australia, y allí el capitán tomó la determinación que comunicó finalmente el martes.
El momento de la eliminación coincidió con la separación de Coria y su coach, el español Josep Perlas, que lo entrenaba desde diciembre de 2004. El entrenador sugirió que al tenista argentino le haría más falta un psicólogo que un coach, porque “se le exigieron más resultados que los que podía dar” aunque “mejorar su técnica y recuperar la confianza perdida dependen de Guillermo”.
La dupla Coria-Perlas debutó en la Copa Hopman de la primera semana de enero de 2005, pero la temporada no reportó los resultados que en principio Coria tenía previstos. Disputó cuatro finales y en tres de ellas, los Masters Series de Montecarlo y Roma y el torneo de Pekín, se encontró con un inspirado Rafael Nadal. Sólo pudo ganar el título en Umag (Croacia) al derrotar a Carlos Moyá. Sus performances en el Grand Slam no fueron excesivamente importantes, llegando a octavos en Roland Garros y Wimbledon y cuartos de final en el Abierto de Estados Unidos. Pese a todo, logró clasificarse para la Masters de Shanghai.
Sin embargo, los problemas con el servicio de Coria se habían convertido desde el Abierto de Estados Unidos en una constante, agravados en Shanghai y llegando al extremo en Melbourne contra Grosjean. Como ni el jugador ni el técnico encontraban soluciones, aun con la temporada ya planificada por ambos, Coria cambió su decisión y comunicó a Perlas que sólo quería contar con él para las Masters Series y los Grand Slam, algo con lo que Perlas no estuvo de acuerdo.
Hay dos candidatos para reemplazarlo: el doblista Martín Rodríguez, recientemente retirado y sin experiencia como entrenador, y el entrerriano Pablo Martín, ex coach de Juan Ignacio Chela, Mariano Puerta, Guillermo Cañas y Agustín Calleri. Coria volverá a presentarse en el torneo ATP de Buenos Aires, que se jugará luego del match contra Suecia por la Davis previsto del 10 al 12 de febrero.
“Es el mejor equipo que puedo formar –destacó Mancini–. Calleri siempre cumplió buenas actuaciones tanto en singles como en dobles y por eso fue citado. Y Nalbandian atraviesa un gran momento de confianza, después de ganar la Masters tiene la oportunidad de confirmar su gran nivel, algo que no es fácil ya que está en los ojos de todo el mundo. De todas maneras, veo que soporta la presión y viene jugando de menor a mayor”, concluyó Mancini.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.