Los clubes europeos que cedan a sus futbolistas para la Eurocopa de Austria y Suiza –en junio próximo, durante el receso– cobrarán 4 mil euros por día y por jugador, una cifra que trepará a 5 mil euros para la Eurocopa del 2012. ¿Cuánto querrán cobrar esos mismo clubes para dar sus jugadores a las selecciones que, como la de la Argentina, compitan en los Juegos Olímpicos de Beijing, dos meses más tarde, cuando los campeonatos ya estén en marcha? Esa, quizás, es la pregunta que el Bayern Munich, por ejemplo, pretende que la AFA le formule cuando le pida la cesión de Martín Demichelis durante cuatro o seis semanas para disputar los Juegos. Si se mantuviera la escala de la Eurocopa, se precisarían 120 mil euros por mes para lograr el “alquiler” del zaguero, uno de los tres mayores de 23 años que Sergio Batista ya anunció que convocará.

El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, hizo ayer un llamamiento a los clubes de la élite del fútbol europeo “para que aborden el tema con flexibilidad y que se pueda llegar a una solución”. En general la FIFA se muestra tajante con las regulaciones y, cada tanto, amenaza con borrar del mapa del fútbol a las federaciones en las que se produzca algún tipo de injerencia política, como sucedió con España una semana atrás. Pero esta vez sólo formuló un pedido cortés, lo que puede parecer llamativo.

No lo es, sin embargo, porque el rígido Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores de la FIFA, ese que obliga a los clubes a ceder a los jugadores 48 horas antes de una fecha oficial, no formula previsiones para el caso del fútbol olímpico, que es el único gran torneo de fútbol a nivel ecuménico que no es aprovechado comercialmente por la FIFA: los dividendos van a parar al bolsillo contable del Comité Olímpico Internacional.

Si la FIFA es la que solventa a las asociaciones abonando el canon que exigen los clubes, el gasto acaso no se justifique entonces si los réditos no van a parar a Zurich sino a Lausanne, donde el COI tiene su sede.

“Ese tema aún no nos ocupa, todavía no hay una decisión final –había advertido un portavoz del Bayern Munich un día antes–. Naturalmente que no tenemos interés en que se nos vaya un jugador fuera por cuatro o seis semanas. Nuestro interés es contar con ellos, para eso se los contrata.”

Javier Mascherano, jugador del Liverpool, es el otro mayor de 23 años que puede tener problemas para ir a la Selección olímpica; se presume que Juan Román Riquelme no sufrirá restricciones por parte de Boca. Sin embargo, los mismos inconvenientes pueden sufrirlos Sergio Agüero con el Atlético Madrid o Lionel Messi en el Barcelona. Batista no convocó al ex delantero de Independiente para el amistoso con Guatemala del pasado 6 de febrero porque el jugador estaba lesionado; Messi, en cambio, estaba en óptimas condiciones y tampoco fue convocado.