Como el fútbol transita por su zona más turbulenta, desde distintos sectores se intenta encontrar el camino de salida. Uno de los dirigentes que no coincide con la nuevas medidas adoptadas por la AFA es José María Aguilar. El presidente de River considera que las nuevas disposiciones no son las ideales para finalizar con la ola de violencia desatada y cree que el Estado es el que tiene que dar sus respuestas para poder erradicar este flagelo.

–¿Por qué señaló que estas resoluciones sólo son para tapar los agujeros?

–Creo que son medidas coyunturales y no se está apuntando al tema de fondo. Ahora dicen que son por estos cuatro partidos y, si por esas casualidades, no pasa nada de aquí a fin de año dirán que estuvieron bien. Pero el año que viene va a suceder el mínimo conflicto y nadie sabrá para dónde ir. Estas medidas siempre se hicieron así.

–¿Y usted le encontró la solución?

–El eje es que el poder de policía es del Estado. Entonces, las autoridades son las que deben brindar soluciones. Porque acá no es que hay problemas en una cancha de fútbol, sino que ellos también me tienen que dar seguridad a mí cuando transito por la calle. Desde ese sector sólo dicen que esto no puede seguir, pero tampoco tienen la claridad para llegar al punto de conflicto.

–¿El derecho de admisión es viable?

–Como dirigente, considero que el derecho de admisión es actividad de la seguridad. No se puede delegar ese poder. Los clubes no están para decir quién entra y quién no entra a una cancha. Este derecho es poco feliz y poco efectivo. El ejemplo fue el partido ente Racing y Boca, que se tuvo que suspender porque enseguida encontraron la forma de romper ese derecho, cuando se dieron cuenta de que los amparos eran válidos. Fue lamentable.

–Pero en River sucedió un hecho grave, cuando los hinchas ingresaron al estacionamiento a dañar los autos del plantel, luego de la derrota ante Racing.

–La Justicia determinó que no fueron los barras. Y si llegaron hasta ahí, fue porque amenazaron e intimidaron a la gente de seguridad del club. Pero acá no se le abrió la puerta de la institución a nadie.

–Y después de estas cuatro fechas, ¿qué puede suceder a partir del año que viene?

–Acá nos tenemos que sentar todos en la misma mesa. Pero insisto, no sólo los dirigentes de fútbol, tiene que estar gente del Gobierno para que ellos también se pongan al tanto de cómo es la situación. El mayor poder lo tiene el Estado y sin ellos no se podrá terminar con todo esto. Las reglas tienen que ser claras y contundentes. No hay otro camino.

–Passarella dijo que este campeonato tendría que quedar vacante, ¿usted piensa de la misma manera?

–El tiene derecho a dar las explicaciones de lo que piensa. Pero también hay que tener en cuenta el momento en que lo dijo.