Los cortes de gas se están convirtiendo ya en un clásico de los inviernos de los últimos años. ¿Tensiones del crecimiento, falta de inversión o ambas? Las explicaciones son variadas, pero las soluciones siguen centrándose en restringir la oferta y en inversiones que corren detrás de una demanda creciente. Los cortes empezaron con el sector productivo y alcanzaron ya a las estaciones de servicio. Y ayer continuaron con la suspensión por completo de los envíos de gas natural a Chile, que en los últimos días ya era mínimo. La intención oficial es no afectar el suministro residencial. Las distribuidoras comunicaron vía fax a los estacioneros que restrinjan el uso a 5000 metros cúbicos diarios. La justificación del Gobierno por la escasez del combustible fue el conflicto que enfrentó a las petroleras con sus trabajadores en Santa Cruz.

Desde el sábado, cuando comenzó la ola de frío que se extenderá hasta el fin de semana, las empresas con contratos “interrumpibles”, aquellas que pagan un gas más barato por exponerse a algún tipo de racionamiento, sufrieron los primeros cortes. Fue más de un centenar de empresas, principalmente de Buenos Aires, La Pampa y Santa Fe. La situación aún no preocupa al sector, pero advierten sobre las complicaciones que provocará si se extiende como los últimos dos años. “Hubo algunas industrias que sufrieron cortes y que tuvieron que parar la producción desde un principio, pero nos dicen que en breve se soluciona”, dijo a Página/12 un ejecutivo de la Unión Industrial.

En las estaciones de servicio del área de influencia de Gas Natural Ban con contratos interrumpibles recibieron a última hora del lunes un fax para que “a partir de las 6.00 del martes” ajustaran su consumo a 5000 metros cúbicos diarios, informó a Página/12 el presidente de la Asociación de Estaciones de Servicios Independientes, Manuel García. El texto asegura “ajustarse a la resolución de Enargas, que autoriza un consumo máximo de 5000 metros”. El directivo admitió haber quedado sorprendido al recibirlo, ya que “el lunes había una temperatura agradable”. La medida recae sobre unas 100 estaciones del total de 355 que operan en la zona norte. Se calcula que al menos el 15 por ciento de las estaciones abastecidas por la distribuidora estarán afectadas por consumir un volumen superior al fijado. Metrogas, por su parte, no implementó todavía ninguna medida.

Las distribuidoras aseguran que los cortes programados se mantendrán al menos hasta hoy y no descartan que puedan extenderse hasta el lunes, si se confirma la ola de frío que está prevista extenderse a los próximos cinco días. Las concesionarias del servicio implicadas son Litoral Gas, Gas Natural Ban, Metrogas, Camuzzi Gas Pampeana, Gas del Sur y Ecogas. Según datos de Enargas, frente a una demanda nacional prevista de 128 millones de metros cúbicos, el lunes el sistema gasífero sólo pudo entregar un volumen de 112 millones. “Estamos limitando la provisión a cien industrias porque velamos por el mantenimiento del consumo residencial”, aseguraron desde una de las distribuidoras con mayor área de concesión.

Hasta el momento no se registraron quejas de usuarios particulares por falta de gas, aunque se verifica en ciertas zonas que la presión es sensiblemente inferior. Tampoco se registró faltante en las pequeñas industrias. “Nuestro sector, incluso en las empresas que utilizan inyectores, no tuvo problemas ni de gas ni eléctrico”, dijo a este diario un fuerte empresario del sector del calzado. Los estacioneros aseguran que la presión se mantuvo en el nivel normal de entre 7 y 8 bar.

El Gobierno, en tanto, salió ayer a responsabilizar a la huelga de los trabajadores petroleros de Santa Cruz por la falta de suministro. En el Ministerio de Planificación sostienen que la medida de fuerza no sólo afectó la inyección proveniente de la Patagonia, sino que además les quitó presión a los gasoductos que ahora necesitan entre tres y cuatro días para poder normalizar sus capacidades de transporte. Con la intención de que la situación no se agrave, el Ejecutivo instó a las cámaras petroleras a llegar a un acuerdo con el sindicato del sector, que finalmente se logró el lunes.

En este contexto, y ante la imposibilidad de cumplir con sus compromisos internacionales, el gobierno argentino suspendió ayer por completo los envíos de gas natural a Chile. El secretario ejecutivo de la Asociación de Distribuidores de Gas Natural de Chile, Carlos Cortés, dijo que los envíos bajaron a cero y que en los últimos cuatro días éstos no habían superado los 500.000 metros cúbicos.