Los industriales brasileños radicados en San Pablo están haciendo un fuerte lobby para definir en su favor el conflicto por la importación de alimentos. El director de Relaciones Internacionales y Comercio Exterior de la Federación de Industrias de San Pablo, Ricardo Martins, manifestó ayer que la entidad presionará al gobierno de su país para que invoque el artículo 24 del Protocolo de Olivos (una normativa firmada en 2002 que busca “la resolución pacífica de controversias en el Mercosur”). Dicho artículo estipula que los cancilleres del bloque traten los problemas comerciales ante casos “excepcionales de urgencia que pudieran ocasionar daños irreparables a las partes”. Según los brasileños, los pedidos de compras de alimentos cayeron un 25 por ciento desde que se habría puesto en marcha la medida. Por su parte, los importadores locales admiten que las trabas iniciales se están relajando, aunque los empresarios supermercadistas afirman que tras el pedido oficial dejarán de comprar importados.