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Las cuentas públicas terminaron agosto con un superávit fiscal primario de 431,9 millones de pesos, pero si se computan las erogaciones para el pago de intereses de la deuda, el resultado pasa a ser de un déficit financiero de 1013,7 millones de pesos. Los datos fueron presentados anoche por el Ministerio de Economía, que destacó el perfil del gasto público, orientado a la inversión en infraestructura social, salud y educación. El Tesoro nacional recibió aportes del Banco Central y la Anses por 1068 millones de pesos, que ayudaron a mejorar las cifras. En agosto de 2010 esos giros habían totalizado 674,7 millones.

El superávit primario de 431,9 millones de pesos fue un 84 por ciento inferior al de igual mes del año pasado, cuando alcanzó a 2722,3 millones. En tanto, en ocho meses de 2011 se obtuvo un saldo favorable de 11.711,5 millones de pesos. Este total es un 33,8 por ciento superior al que se había registrado en el mismo lapso de 2010, que había sido de 11.279,6 millones de pesos.

Los ingresos totales de agosto ascendieron a 47.457,3 millones de pesos, con un alza interanual de 33 por ciento, mientras que los gastos treparon a 47.025,4 millones, con un incremento de 43,3 por ciento.

En cuanto al resultado financiero, el déficit de agosto ascendió a 1013,7 millones de pesos, lo que representa una diferencia negativa de 3288 millones de pesos, frente al superávit de 2275,2 millones producido en el mismo mes del año pasado. Con el resultado del mes pasado, el balance financiero acumula desde enero un rojo de 3380,2 millones de pesos.