A días de las elecciones presidenciales, la demanda privada de dólares se mantiene elevada, tendencia a la que contribuye la incertidumbre financiera global. Ayer, el Banco Central debió intervenir en el segmento mayorista con ventas por 90 millones de dólares y un monto similar en contratos de la divisa a futuro. Con este accionar evitó una suba de la divisa que, al público, se mantuvo en 4,25 pesos para la venta. En la Bolsa porteña, las acciones y los bonos cerraron la rueda en positivo, con un volumen discreto de negocios.

El Central reiteró su estrategia de ofrecer en las pantallas electrónicas del mercado importantes bloques de dólares, con el objetivo de desarticular la demanda. Es por eso que algunos cambistas contabilizaron un volumen de ventas oficiales en torno de los 180 millones. Desde el Central aclararon que lo que realmente se transó fue menos de la mitad del volumen puesto a disposición de los demandantes. El stock de reservas finalizó entonces en 48.002 millones de dólares, 12 millones por debajo de la rueda previa. Por el lado de las operaciones a futuro, en el Rofex el contrato a octubre se negoció a 4,225 pesos, noviembre a 4,263 y para fin de año a 4,304.

En el mercado bursátil, la suba en Wall Street (con un 1,6 por ciento de parte del Dow Jones) dio impulso a las acciones líderes, que cerraron con un alza de 2,1 por ciento, ampliando la ventaja en el mes a 11,3 por ciento. Dentro del panel Merval se destacaron los papeles del Banco Francés (6,7 por ciento), Edenor (6,5), Petrobras (5,6), Banco Macro (4,9), Tenaris (4,2), Molinos Río (3,9) y Aluar (1,9). En títulos públicos mostraron fuertes signos de recuperación el Bocon VI, con una suba de 4,8 por ciento, seguido por el Bogar 2018 (2,9) y el Boden 2015 (2,3). Por su parte, los cupones de PIB, que en los últimos días evidenciaron una alta volatilidad, finalizaron con una mejora de 1,6 por ciento.