Al filo del vencimiento del plazo otorgado por el gobernador de Chubut, la petrolera YPF hizo llegar por escrito su descargo, en el que asegura que “cumplió en las áreas Escalante-El Trébol y Campamento Central-Cañadón Seco con las pautas de inversión necesarias para una explotación racional y adecuada de los yacimientos”, tal cual lo establece el artículo 31 de la Ley de Hidrocarburos. Bajo este argumento y junto a cifras en las que compara la evolución de sus inversiones con las de otras compañías en la misma provincia, la petrolera que conduce el grupo Eskenazi busca desarticular jurídicamente la ofensiva del gobernador Martín Buzzi, que junto a su par santacruceño, Daniel Peralta, podría anunciar hoy la rescisión de los contratos de concesión en dichas áreas. Hasta última hora de ayer, la convocatoria para hoy a las 18 a la altura del puesto policial Ramón Santos, sobre la ruta 3 y justo en el límite entre Chubut y Santa Cruz, estaba confirmada. Al menos dos funcionarios de alto rango del Ministerio de Planificación, Daniel Cameron y Roberto Baratta, habían comprometido su asistencia.

Según señalaron fuentes empresarias, el descargo presentado por YPF al gobierno de Chubut señala que la empresa “en ningún momento dejó de invertir” en las dos concesiones sobre las que se presentó el cuestionamiento. “YPF desembolsó sumas millonarias, por montos que superan con creces lo hecho por otras empresas en la misma provincia.” “La imputación formulada contra YPF viola la garantía de igualdad establecida en el artículo 16 de la Constitución Nacional”, sostiene la firma. “Resulta llamativo que, pese a que la mayoría de las áreas ubicadas en el ámbito de la provincia sufren una declinación en sus niveles productivos, sólo se reproche tal circunstancia a YPF”, manifiesta el escrito.

Puntualmente, la ex petrolera estatal refiere que entre 2007 y 2011 la producción total de las áreas operadas por YPF en la provincia se ha incrementado en un 2,6 por ciento, “a pesar de los intensos conflictos sociales vividos en los últimos dos años”. También asegura que las reservas probadas en yacimientos explotados por YPF muestran un incremento del 18 por ciento respecto del año anterior y del 24 por ciento en relación con 2007. En cuanto a las inversiones en la provincia, afirma YPF que alcanzaron a 350 millones de dólares en 2011. “Los pozos terminados durante 2011 se incrementaron un 14 por ciento respecto del año anterior y un 83 por ciento en relación con 2007”, sostiene el documento.

La respuesta que ensayó YPF ratificó su plan de inversiones, pero no ofrece uno nuevo y, en cambio, niega las imputaciones de falta de inversiones o abandono de áreas que le hicieran el gobernador Buzzi. En consecuencia, pareciera más una carta jugada para fortalecer su posición en una futura judicialización del tema que una respuesta para satisfacer la demanda del gobierno chubutense. En este contexto, no habría razones para esperar que el gobierno de Chubut desistiera de realizar el acto previsto para hoy.

Con respecto a la relación entre la petrolera y la provincia de Santa Cruz, la respuesta que le hizo llegar YPF –por separado de la dirigida a Chubut– apela a la extensión de una prórroga del plazo, dado que la última intimación recibida tiene fecha del lunes último. “Este último emplazamiento habla de tres áreas de concesión, mientras que el primer reclamo del gobernador Peralta se refería a 23 yacimientos”, señaló una fuente de YPF, que además anticipó que la principal referencia que hará la empresa en su descargo es que sus inversiones en los últimos cuatro años en la provincia más austral alcanzaron a 957 millones de dólares, de los cuales 380 millones corresponden sólo al último año.

La eventual rescisión de contratos y el reclamo de reversión de las áreas a la administración provincial –que Chubut ya habría resuelto y que Santa Cruz podría imitar– tendrían el respaldo del gobierno nacional, que alentó la presión sobre las petroleras y refinadoras para exigir un mayor compromiso para incrementar la producción de hidrocarburos y combustibles. El embate terminó centrándose en YPF. Y no por nada: es la ex petrolera de bandera capturada por capitales privados, firma emblemática en la historia del sector. Es, además, la que tiene el mayor número de áreas concesionadas así como de refinerías. Y la principal red de estaciones de servicio. La respuesta de YPF no fue la deseada, aunque tal vez sí haya sido la esperada: la defensa de lo hecho, sin proponer un esfuerzo inversor como el reclamado. Si hoy se concreta lo que el gobierno de Chubut viene anunciando, empezará a cerrarse una etapa. Aún faltan elementos para conocer cómo será la que se abre.