ECONOMíA › ALLANAMIENTO JUDICIAL EN LA CASA CENTRAL DEL CITIBANK
Fuga y publicidad engañosa
Por orden judicial la sucursal argentina del banco estadounidense Citibank deberá explicar mucho más que lo demandado por el Banco Central o por la comisión parlamentaria que investiga la fuga de dinero. Luego de un allanamiento realizado ayer, la entidad financiera se comprometió a entregar, en un plazo de 96 horas, la documentación sobre la salida de dinero a través de sus ventanillas de los últimos siete años, así como también las pautas publicitarias que respaldaban la solvencia de la sucursal local sobre la base de la solvencia de la casa matriz. El allanamiento se produjo en el marco de una causa por fraude iniciada por un ahorrista por la no devolución de sus depósitos.
Las decisiones del Poder Judicial todavía pueden deparar sorpresas. Luego de que, en primera instancia, la demanda por fraude y publicidad engañosa fuera rechaza por “inexistencia de delito” por el juez federal Jorge Ballestero, la Sala II de la Cámara Federal hizo lugar a la apelación presentada y le ordenó al juez que continúe la investigación. En consecuencia, Ballestero procedió con la recolección de pruebas solicitada por la parte demandante, en particular la documentación sobre el dinero que la sucursal local del Citi giró a su matriz en los últimos siete años y sobre la publicidad que, durante el mismo período, respaldaba la supuesta solvencia de la entidad. Carlos Wiater, el abogado querellante, dijo a este diario que estas dos pruebas constituyen “las dos puntas” para demostrar la existencia de fraude en perjuicio de su cliente. La causa está caratulada como retención indebida y publicidad engañosa.
El primer resultado de las medidas fue el allanamiento a la sucursal local del banco estadounidense. El juez había dispuesto el allanamiento “a efectos de que se haga entrega de toda la documentación relacionada con giros o remesas de partidas de dólares correspondientes a capital, utilidades, o cualquier otro concepto, en los últimos siete años hacia la casa matriz, con sede en el exterior”. Sin embargo, el grueso de la documentación no fue retirado de la entidad financiera. La parte querellante aceptó que el procedimiento se realice en términos “amistosos” y aceptó la propuesta de los representantes del banco de entregar las carpetas de los últimos siete años” en un plazo de 96 horas.
Paralelamente, el juez envió un oficio a la comisión parlamentaria de investigación sobre fuga de capitales, que preside el diputado cordobés Eduardo Di Cola. En este caso, para que le remita la información de los recursos fugados por el Citibank durante la crisis de 2001.
Ballestero ordenó también a la División Defraudaciones y Estafas de la Policía Federal, que secuestrara la documentación publicitaria relacionada con la solvencia y respaldo del Citibank desde 1995 hasta la fecha, a fin de indagar si la entidad prometió que la casa matriz garantizaba con sus fondos los depósitos que se realizaran en la filial argentina.
Wiater adelantó que ya pidió las mismas medidas dispuestas por Ballestero, al Juzgado Federal Nº 7 interinamente a cargo del juez Jorge Urso. Pero en este último caso, los allanamientos deberían hacerse en las sucursales locales de los bancos españoles BBVA Francés y Río-Santander, entidades que también han sido demandadas en su país de origen, siempre por fraude y publicidad engañosa. En el juzgado de Urso se tramitan las demandas contra las entidades españolas de 1400 ahorristas.