Una negociación al máximo nivel entre el Gobierno y el Grupo Techint permitió llegar a un acuerdo para la distribución de dividendos de la acería Siderar, controlada por el holding de Paolo Rocca. Esta vez no hubo un escándalo como el año pasado, cuando Techint intentó resistir la decisión de la Anses de hacer valer el peso de sus acciones y nombró como director de la empresa a Axel Kicillof. Aquella pelea se terminó resolviendo a favor del Gobierno y de ahí en más hubo un proceso de recomposición de relaciones. Ayer Siderar aprobó en reunión de directorio que repartirá entre sus accionistas sólo 180 millones de pesos en efectivo, correspondientes a los dividendos del ejercicio 2011, mientras destinará 1090 millones para inversiones. Además, 67 millones irán a reserva legal para aumentar el capital accionario, y 1,1 millón a la Fundación Hermanos Rocca. Es decir, el 81,2 por ciento de las ganancias constituirán una reserva para futuras inversiones. Fuentes oficiales destacaron ese resultado ante este diario. “Es un monto muy importante para inversiones, en línea con lo que demanda el país”, dijeron. Además, señalaron que la distribución de dividendos cayó 88 por ciento respecto del ejercicio 2010, cuando se repartieron 1511 millones. En la reunión, la Anses confirmó a sus tres directores en la empresa, incluido Kicillof.