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Lejos de la histeria del día después de las elecciones, ayer los financistas operaron con mayor calma. Las acciones recuperaron 2,3 por ciento en promedio tras la fuerte caída de la jornada anterior y las tasas de interés continúan hacia abajo. En el mercado de cambios, el Banco Central tuvo que intervenir comprando 50 millones de dólares para impedir un derrumbe del dólar. Y lo logró: la moneda estadounidense cerró, sin cambios, en 2,88 pesos para la venta.
Al mediodía, el índice MerVal mostraba una suba de casi el 4 por ciento. Pero muchos operadores eligieron el momento para desprenderse de papeles, ante la perspectiva de que el mercado accionario podría volver a ajustar bruscamente hacia abajo en los próximos días. Para Rafael Ber, de la consultora Argentine Research, la tendencia alcista del mercado de acciones y títulos públicos se retomará cuando el nuevo gobierno encare la renegociación de la deuda. Para otros analistas, como Luis Alvarez Nanni, de Luis Alvarez Sociedad de Bolsa, la fuerte baja de anteayer fue aprovechada por algunos inversores, atraídos por los precios más baratos.
Lo cierto es que estos vaivenes del mercado hay que enmarcarlos en la especulación de los operadores frente a sus expectativas políticas y lo que ocurre en la realidad. En la city daban por descontado una definición entre Carlos Menem y Ricardo López Murphy o, directamente, un triunfo del riojano en primera vuelta.
Al revés de la volatilidad bursátil, el mercado del dinero muestra una apacible realidad. El Central no sólo adquirió 9,4 millones de dólares a los exportadores sino también otros 40,5 millones a los bancos, un record en este tipo de operatoria. Es decir, el Central se quedó con casi todos los 67 millones liquidados ayer por los exportadores. En lo que va del mes, Alfonso Prat Gay ya embolsó 305,7 millones para las reservas, que ya rondan los 10.800 millones de dólares. La calma en el mercado cambiario también se refleja en los precios de los futuros. El dólar a fin de mayo cotizó ayer a 2,90 pesos.
La indiferencia de los ahorristas acorralados en sacar los fondos de los bancos enfrió las tasas de interés. En la licitación de ayer de Letras del Banco Central, la caída resultó de 0,5 por ciento en promedio. Por un plazo fijo a 30 días que hace dos semanas rendía entre 25 y 30 por ciento anual, ahora la tasa cayó por debajo del 20 por ciento. Norberto Giúdice, director ejecutivo de la Asociación de la Banca Especializada (ABE), descartó un recalentamiento de las tasas de interés a medida de que se acerque la fecha del ballottage.