La sangría en los depósitos en moneda extranjera sigue constante, aunque su ritmo de fuga parece haberse estabilizado. Según las cifras del Banco Central, el retiro de estas colocaciones en la primera semana de septiembre alcanzó a 76 millones de dólares, equivalente a una caída de 0,9 por ciento, hasta ubicarse en 8133 millones. La fuga diaria se ubicó en 15,2 millones, levemente superior a los 12 millones que se registraron en la última semana de agosto. En este período, los depósitos a plazo fijo del sector privado crecieron cerca de mil millones de pesos, con aumentos tanto en las inmovilizaciones por hasta un millón como superior a ese monto. En la plaza cambiaria, el dólar cerró la semana sin modificaciones en las pizarras oficiales del microcentro, a un promedio de 4,68 pesos. El Central compró dólares y las reservas se ubicaron en 45.355 millones, con un aumento de 55 millones.

Según el informe del Central, las colocaciones a plazo en pesos continuaron en niveles record, arrojando un promedio para los últimos 30 días en torno del 46 por ciento. Por el lado de los depósitos en moneda extranjera, desde la implementación de controles a la compra de divisas del 29 de octubre último, cuando el stock ascendía a 14.746 millones de dólares, acumula una retracción del 44,8 por ciento. Por su parte, el saldo de préstamos en pesos al sector privado se incrementó en más de 2000 millones en la semana. Casi la totalidad de esa suba se centró en líneas comerciales y principalmente en adelantos en cuenta corriente.

El precio de las acciones líderes reflejó el optimismo con que los inversores recibieron un nuevo plan de estímulo lanzado por la Reserva Federal. El panal MerVal se sumó con un alza de 1,8 por ciento. Los papeles más beneficiados fueron los de Petrobras (4,2 por ciento), BBVA Banco Francés (3,9) y Telecom (3,4). La mejora en las cotizaciones también alcanzó a los títulos públicos, como el bono PAR en pesos, que avanzó 4,2 por ciento, mientras que los cupones de PBI en pesos ganaron un dos por ciento. Esta recuperación de la deuda pública se reflejó en una significativa caída del riesgo país, de 6,1 por ciento, a 860 puntos, mientras que en la semana acumula un retroceso superior al 12 por ciento.