La recaudación de julio marcó un nuevo record histórico mensual al alcanzar los 80.298 millones de pesos. Los registros del mes pasado superaron la marca alcanzada en mayo y representan un aumento interanual del 31 por ciento. El comportamiento de los ingresos fiscales de julio refleja la reactivación en la actividad económica, la implementación de los incrementos salariales, el sostenimiento del mercado de trabajo y los aumentos de precios. Los datos que difundió ayer la AFIP habían sido anticipados por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner el miércoles, durante su intervención en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires. La mejora en la recaudación estuvo impulsada por los ingresos provenientes del Impuesto a las Ganancias, el IVA, la seguridad social y el tributo a los créditos y débitos. Los derechos de importación también tuvieron el crecimiento más importante, evidenciando el incremento en las compras externas, mientras que las retenciones cayeron.

Durante los primeros siete meses de 2013, los ingresos fiscales ascendieron hasta los 487.228 millones de pesos, un incremento de 28,6 por ciento respecto del mismo período del año anterior. El miércoles CFK remarcó que entre 2003 y 2012, la recaudación tuvo un crecimiento promedio de 30 por ciento anual, mientras que en el período 1997 y 2002, los ingresos fiscales crecieron un uno por ciento, a pesar de los diferentes aumentos en los impuestos.

Los ingresos por Ganancias treparon 42,4 por ciento en julio en relación con el mismo mes del año anterior. La suba en la recaudación obedeció al aumento del impuesto que pagan las sociedades. A través de un comunicado, la AFIP explicó que el aumento del 20 por ciento en las deducciones personales vigente desde marzo pasado atenuó el incremento de los ingresos por retenciones sobre los sueldos. No obstante, el mayor ingreso disponible para los trabajadores en relación de dependencia genera un impulso al consumo que se traduce en una mayor facturación de las empresas y la consecuente mejora en la recaudación por Ganancias.

El incremento en las deducciones de Ganancias y las exenciones del pago del impuesto para el medio aguinaldo de diciembre y junio representaron un estímulo fiscal –o “sacrificio”, desde la visión de AFIP– de 12.990 millones de pesos desde fines del año pasado. Esa inyección de fondos se suma a diferentes medidas, como la actualización de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la suba en jubilaciones que traccionan el mercado interno en el actual escenario de recuperación económica. Con ese tipo de medidas, más las mejoras salariales, se registró un aumento sustantivo en la recaudación de los ingresos vinculados al consumo privado.

La recaudación por IVA, uno de los impuestos directos más regresivos ya que grava con igual carga a todos los consumidores sin diferenciar, por ejemplo, si se trata de beneficiarios de la AUH, registró una suba de 38,8 por ciento en julio. El IVA DGI (impositivo) escaló 38,6 por ciento, mientras que el IVA Aduanero lo hizo un 29,6 por ciento. Los datos del mes pasado marcaron un nuevo máximo histórico para el tributo que superó el establecido en mayo pasado. En el comportamiento de este impuesto también incide la dinámica de los aumentos de precios. Otro tributo vinculado a la actividad económica que reflejó un fuerte incremento son los Créditos y débitos bancarios que crecieron 41,8 por ciento el mes pasado. En este caso también se alcanzó un nuevo record.

En materia de seguridad social también se quebró la marca fijada en enero con un incremento de 38,4 por ciento. El comportamiento de esos ingresos evidencia el sostenimiento del mercado de trabajo y los aumentos de salarios que este año rondaron un 24 por ciento.

“Donde no hemos batido records es en derechos de exportación. El sector productor primario exportó menos”, se lamentó el miércoles CFK. Los ingresos por derechos de exportación cayeron 15,8 por ciento en julio. La hipótesis del Gobierno es que las firmas exportadoras están demorando sus ventas externas con fines especulativos y de presión. No obstante, el mal comportamiento de las retenciones contrasta con los ingresos por derechos de importación. El alza del impuesto fue de 68,4 por ciento, un nuevo record en la serie histórica.