“El mundo hoy mira a la Argentina con mucha expectativa por el desarrollo de los recursos no convencionales”, aseguró ayer el presidente de YPF, Miguel Galuccio, en la apertura de la Exposición Oil & Gas 2013 en La Rural. El ejecutivo destacó los resultados parciales que obtuvo YPF bajo su gestión y reiteró que el despegue del sector llegará de la mano del shale, aunque dejó en claro que ese desafío no sólo involucra a la petrolera controlada por el Estado, sino al conjunto de la industria, a los trabajadores y a los distintos niveles de gobierno.

Galuccio, quien le deseó suerte a Cristina Fernández de Kirchner en la operación de hoy, recordó que en agosto de 2012, cuando presentó por primera vez las directrices de su plan quinquenal, se propuso como objetivo inicial revertir la declinación de la producción a partir de una mejora de la eficiencia en los emprendimientos maduros y el delineamiento de un modelo de explotación de recursos no convencionales. Aseguró que en los primeros 18 meses de gestión estatal la declinación ya se revirtió y que ahora la producción se está expandiendo. “Lo fundamental es volver a convertir al país en exportador neto de energía en el largo plazo”, agregó.

Luego detalló los principales números de la compañía. Sostuvo que la inversión creció un 94,7 por ciento interanual en el primer semestre, al trepar de 5544 millones a 10.792 millones de pesos. Eso se evidencia en la cantidad de equipos de perforación, que aumentaron de 25 a 63 en dos años, y de equipos de Workover, que pasaron de 49 a 85 en el mismo lapso. Esa mayor inversión, dijo Galuccio, es la que permitió no sólo revertir la declinación, sino encadenar tres trimestres consecutivos de crecimiento, tanto en petróleo como en gas.

El ex ejecutivo de Schlumberger destacó que en los últimos 12 meses se financió con el flujo de caja de la firma casi el 80 por ciento de las inversiones. Además, se emitieron obligaciones negociables en el mercado local por 16.500 millones de pesos, de los cuales 7200 se produjeron en lo que va de 2013. Galuccio recordó también que se logró mejorar el perfil de deuda de la compañía al extender el promedio de los vencimientos de 1,9 a 3,7 años. En lo que refiere a las tasas, sostuvo que la petrolera paga un interés promedio de 5,2 por ciento en dólares y 18,5 por ciento en pesos.

Galuccio dijo que la inversión no se concentró solo en exploración y producción (upstream), sino también en refinación y comercialización (downstream), y puso como ejemplo los desembolsos que se vienen realizando en la refinería de La Plata, dañada por una inundación y posterior incendio, y el Complejo Industrial Luján de Cuyo.

Un apartado especial de la exposición de Galuccio estuvo destinado a resaltar el potencial no convencional de Argentina. El presidente de YPF fue uno de los que más insistió, dentro y fuera del Gobierno, con la necesidad de fortalecer la inversión en la formación Vaca Muerta, aunque los resultados no se vayan a ver en el corto plazo. Su principal apuesta es ésa, y volvió a dejarlo en claro al recordar que Argentina tiene reservas no convencionales por 802 billones de pies cúbicos de gas y 27 mil millones de barriles de petróleo, las que ubican al país como el segundo y cuarto reservorio a nivel mundial, respectivamente.

En Vaca Muerta ya se está desa-rrollando un primer cluster junto a la petrolera Chevron en un área de sólo 20 kilómetros cuadrados, donde en el primer año la firma estadounidense desembolsará 1240 millones de dólares. “Imagínense qué pasaría en Argentina si somos capaces de desarrollar los 75 cluster que tenemos en Vaca Muerta. No solamente cambiaríamos el futuro energético del país, sino la economía de las regiones donde están esos recursos”, aseguró Galuccio. Por último, reiteró, al igual que lo hizo en Londres la semana pasada, que si el país avanza en esa dirección está en condiciones de repetir la revolución energética que concretó Estados Unidos.

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