La distribuidora Edesur cuestionó ayer públicamente el congelamiento tarifario y lo vinculó con los cortes que se registraron en el suministro en los últimos días. “Si hablamos que la tarifa de la Capital Federal y del Gran Buenos Aires es la más baja de toda Latinoamérica, está marcando que hay una dificultad, es muy difícil que se pueda prestar un servicio de calidad. Es un tema que las autoridades van a tener que analizar”, indicó la vocera de la empresa, Alejandra Martínez, en declaraciones radiales. El Gobierno le respondió con dureza. “A confesión de parte, relevo de pruebas: si no pueden prestar el servicio, el camino es el que indicó el jefe de Gabinete de Ministros”, aseguró el ministro de Planificación, Julio De Vido. A su vez, el funcionario sostuvo que “relacionar la calidad del servicio con las tarifas es un planteo inadmisible y extorsivo, y el Gobierno no va a permitir ningún tipo de extorsiones”.

La vocera de Edesur habló por Radio 10 para informar sobre las tareas que viene realizando la compañía para tratar de normalizar el servicio. Martínez dijo que este fin de semana ya no habrá clientes sin luz en el área de concesión de la empresa. “Confiamos en que en lo que va del día y el fin de semana no haya clientes sin luz en sus hogares, y anticipamos que se vienen unas Fiestas con altas temperaturas, y la empresa va a trabajar y va a tener atención en sus oficinas comerciales el 24 y el 31”, declaró. Además, la representante de la empresa explicó que lo que están “haciendo es atender casos como los de Villa Crespo, donde –según dijo– la mayoría de la gente ya tiene el servicio, aunque puede quedar algún tema puntual por resolver”, y que una de las medidas paliativas hasta la total recomposición del servicio será la disposición de “grupos electrógenos de gran porte”.

Luego fue consultada sobre las tarifas y fue cuando manifestó la supuesta dificultad para brindar un servicio de calidad con lo que les ingresa a partir del pago de sus clientes. Horas más tarde, el ministro de Planificación, Julio De Vido, emitió un comunicado cuestionando los dichos. “Es una expresión de índole extorsiva en momentos de tan alta demanda por la ola de calor, que ya dura diez días y que afecta gran parte de nuestro país, cuando además todavía hay clientes de esta compañía que no han recuperado el suministro”, sostuvo.

“En vez de realizar expresiones altisonantes lo que debe hacer la compañía es mejorar el servicio y los costos”, señaló el ministro, quien sostuvo que “relacionar la calidad del servicio con las tarifas es un planteo inadmisible y extorsivo, y el Gobierno no va admitir ningún tipo de extorsiones”. Por último, el funcionario recordó que “las empresas distribuidoras de energía están obligadas a prestar un servicio en consonancia con lo que plantea el contrato de concesión, o sea corte cero y con los parámetros de calidad adecuados, más allá de cualquier otra circunstancia, porque para eso están a cargo de un servicio público y firmaron un contrato”.

Anoche, mientras tanto, todavía se registraban cortes aislados en algunos barrios de Capital y Gran Buenos Aires y protestas de los vecinos que permanecen sin servicio. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aseguró el jueves que las distribuidoras eléctricas serán multadas por las interrupciones que se registraron en los últimos días y además sostuvo que Edenor y Edesur deben atender los reclamos de sus clientes y resarcirlos económicamente por los daños que pudieran haberles causado a raíz de los cortes. El funcionario dio a entender también que si los problemas en la prestación del servicio se extienden, el Gobierno podría decidir la estatización del servicio. La posición oficial es que los cortes son responsabilidad de las distribuidoras, porque en el eslabón de generación hay energía suficiente para afrontar la demanda.