Cristina Fernández recibió ayer al equipo económico en la Casa Rosada, con cuyos integrantes analizó la actual política monetaria y fiscal. La Presidenta se reunió con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; el ministro de Economía, Axel Kicillof; el presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, y el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, con quienes repasó los temas vinculados con el tipo de cambio, la recaudación, las altas tasas de interés del sistema financiero y el impacto de esta última variable en el nivel de créditos al sector privado. El encuentro se produjo mientras en la city la cotización del dólar registró una leve corrección de medio centavo, para ubicarse en 8,075 pesos, mientras que las especulaciones en torno de una aceleración en el ritmo de devaluación motivó una suba en el segmento paralelo hasta los 11,70 pesos, pese a que en la semana el Central volvió a planchar la cotización del dólar. La intervención del organismo en el mercado mayorista fue una compra neta en torno de 20 millones de dólares, que se reflejó –tras el pago de algunos compromisos con organismos multilaterales de crédito– en una suba de ocho millones en las reservas, hasta 28.393 millones.

Con algunas operaciones más que las de costumbre, las cuevas que todavía se mantienen activas tras el ancla en el tipo de cambio que mantuvo durante casi cien días el Central ajustaron el precio ayer en 40 centavos, hasta los 11,70 pesos. Durante la rueda hubo algunas que pidieron hasta 11,80 pesos, pero esos precios no fueron convalidados. La argumentación que se escucha por parte de banqueros es que la baja en las tasas de interés que se promueve ahora desde el Central está volviendo atractivo al dólar, pese a que el rendimiento de un plazo fijo hoy emparda los pronósticos privados –y la tasa implícita que se desprende de contratos a futuro– de devaluación para el resto del año. Las altas tasas que cobran muchos bancos está limitando el financiamiento con destino al consumo y la inversión, situación que motivó la reunión que mantuvo ayer la Presidenta con los funcionarios.

Los alertas del establishment financiero son acompañados de versiones de un enfrentamiento declarado entre algunos integrantes del equipo económico, que incluirían amenazas de renuncia. Sin embargo, los protagonistas buscaron mostrar ayer unidad durante el encuentro –habitual, según dijeron a este diario desde las distintas dependencias oficiales– con la Presidenta. La reunión comenzó pasadas las 18, luego de que la jefa de Estado encabezara la inauguración de una sede del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (ver página 3) en la Costanera Sur. En la reunión se debatió sobre el impacto de las tasas de interés en el consumo y el impacto de este último en el nivel de recaudación. También se pasó revista a la flotación administrada que lleva adelante el organismo monetario.

La suba de seis centavos en el dólar que convalidó en los últimos 15 días el Central, luego del congelamiento previo de casi dos meses, reavivó la especulación financiera en la city y la brecha entre el blue y el oficial se amplió a casi el 46 por ciento, hasta casi duplicar el piso que registraba hace dos semanas (25,7 por ciento). Esta especulación también se trasladó a operaciones de compraventa de bonos y acciones, en lo que se denomina contado con liquidación y dólar Bolsa, dependiendo de si se liquidan las divisas en el país y en el extranjero. Por esta maniobra, que consiste en la compra de un activo en pesos para su posterior venta en moneda extranjera, se convalidó un precio para el billete verde de 10,92 pesos en el liqui y 11,37 en dólar Bolsa.

También se registró una mayor preferencia por los activos en dólares con los títulos públicos. El bono Boden 2015 registró una ganancia de 1,5 por ciento, el Bonar X avanzó 1,3 por ciento, seguido por el Global 17, con un alza de 1,2 por ciento. Por su parte, el Cupón PIB en dólares, que se encontraba rezagado en precio respecto de su par en pesos, recuperó 3,4 por ciento en la jornada. Por su parte, el panel de acciones líderes sumó una mejora de 0,9 por ciento, impulsado por los papeles del sector financiero y energético, en una rueda en que se negociaron 151 millones de pesos.