La actividad industrial retrocedió 2,2 por ciento en febrero respecto del mismo mes del año pasado, al tiempo que acumuló una caída del 2 por ciento en el primer bimestre del año, según lo informó ayer el Indec. El indicador del sector manufacturero anotó disminuciones en los últimos 19 meses, lo que se explicó principalmente por el flojísimo desempeño de la producción automotriz, aunque también cayó la producción de alimentos, tabaco, textiles, sustancias y productos químicos, productos de editoriales e imprentas e industrias metálicas básicas. La contracara fue la suba en el bloque de minerales no metálicos, que adelantó la recomposición de la actividad en la construcción y en el complejo metalmecánico, lo que evidencia una mayor producción de electrodomésticos y maquinaria agrícola. Desde el equipo económico aseguraron que el movimiento del mercado interno empezó a despegar a principio de este año, por lo que en el segundo trimestre la rama manufacturera mostrará una recuperación.

La producción automotriz es el principal elemento para explicar la caída de la actividad industrial. El sector marcó un retroceso de 14,9 por ciento en febrero respecto del mismo mes del año pasado. Las exportaciones de este rubro, que mayormente se dirigen a Brasil, anotaron una fuerte contracción. El último informe de comercio del Indec precisó que las terminales locales exportaron al mercado brasileño en febrero 371 millones de dólares, con una merma de 39,7 por ciento. El principal socio comercial de la Argentina se encuentra en un estancamiento de su mercado interno, creciendo a tasas cercanas a cero y con pronósticos de recesión del PBI para 2015. La estrategia del Gobierno es reforzar los acuerdos bilaterales para evitar mayores pérdidas del negocio automotor.

Además de vehículos, otro de los rubros relevantes que anotó mermas el mes pasado fue alimentos (-2,3 por ciento). Las caídas fueron de 4,6 por ciento en carnes rojas, 3,2 por ciento en lácteos, 2 en azúcar, 7,8 en yerba mate y 7,5 en bebidas. A diferencia de este desempeño, carnes blancas creció 10,3 por ciento, mientras que molienda y oleaginosas avanzó al 7,6 por ciento. Por su parte, el complejo de sustancias y productos químicos también marcó una fuerte contracción, al anotar una baja del 5,4 por ciento, en la que se destacó la merma de agroquímicos (-1,8), de detergentes (-8,7) y de materias primas plásticas (-8,8).

En lo que refiere a otros sectores industriales con caídas, se precisó que el textil anotó una baja de 13,3 por ciento, tabaco del 16,7 por ciento, edición e impresión del 4,8, y metálicas básicas, del 0,5.

Pese a estas caídas, el indicador manufacturero adelantó cierto repunte en el nivel de actividad económica local. Esto se observó a partir de la expansión del 7,8 por ciento en la producción de minerales no metálicos, los cuales se usan para la rama de la construcción. En el desagregado, se subrayó que vidrios marcó un avance del 12,6 por ciento, mientras que cemento para edificación computó un alza del 13 por ciento. Otra actividad relevante con fuertes subas fue la metalmecánica (9,6 por ciento), lo que se debió a la mayor producción de electrónica de consumo y de bienes de capital para el agro. La refinación de crudo también marcó una expansión al crecer 1,4 por ciento.

“En diciembre hubo un punto de inflexión en el nivel de actividad. Subió el consumo, el turismo estuvo muy firme, la construcción está más sólida y empezaron a verse brotes verdes en la industria (petróleo y metalmecánica); en el sector automotor, no. El sendero estará más claro en el segundo trimestre”, aseguraron desde el Ministerio de Economía, para manifestar mayor optimismo respecto del movimiento económico en los próximos meses. El Gobierno avanza con herramientas de estímulo a la demanda agregada con el objetivo de reimpulsar la producción local. El plan de crédito en cuotas Ahora12 es una de las apuestas centrales para fomentar el mercado interno.