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Entidades de consumidores y distintos gremios convocaron para hoy a un boicot a los supermercados de todo el país. Consumidores Libres de Héctor Polino, la CTA de Pablo Micheli y la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires a cargo de Eugenio Semino son algunas de las instituciones que coordinan la protesta. “Super-Vacíos será el lema pacífico pero elocuente de una ciudadanía cansada ante la inflación y la suba permanente e injustificada de precios”, indicaron en un comunicado. Agregaron que “dejar de comprar por un día no es solución, pero estamos convencidos de que será un claro mensaje para los grandes comercios que abusan de la gente”. Los supermercados chinos agrupados en Cedeapsa también apoyaron la medida, al acusar a las grandes tiendas de formadores de precios. La Federación Agraria fue otra de las entidades que mostraron adhesión a la iniciativa.

Las asociaciones de defensa del consumidor alertaron por la fuerte aceleración en los precios de los alimentos. Polino, por caso, calculó que la canasta básica cerrará con un incremento del 50 por ciento en 2016. “La idea no es afectar los niveles de ingresos de los supermercados sino manifestar el estado de protesta de los consumidores frente a las permanentes remarcaciones de precios que tienen un alto componente especulativo”, dijo el titular de Consumidores Libres. Aseguró que “el objetivo es que los clientes dejen de comprar en los locales de las cadenas de todo el país para que el Estado tome nota de esta insatisfacción”.

Pedro Bussetti, de Deuco, pidió el apoyo de la población. “Es posible el boicot, pero tiene que ser masivo. Hay que hacer una alianza con sectores de trabajadores y organizaciones sociales. Si no, es un anuncio y queda ahí. No es sencillo convocar a un paro del consumo. Sin un despliegue territorial, estas medidas fracasan.”

En marzo las consultoras privadas registraron una aceleración en la inflación, con alzas de hasta el 6 por ciento en la canasta básica. La estimación de inflación del Gobierno fue del 25 por ciento para este año, una cifra difícil de cumplir si se tiene en cuenta que sólo en el primer trimestre los precios acumularon más del 12 por ciento y se esperan mayores impactos por el alza del transporte y el gas.