La producción industrial en Brasil cayó en junio un 6 por ciento en la comparación interanual y acumula en el primer semestre una baja del 9,1 por ciento, informó ayer el Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE). En este contexto negro para la manufactura del país vecino, que tiene un impacto significativo sobre la economía argentina, el único dato positivo fue que el nivel de actividad de junio representó un alza del 1,1 por ciento frente a lo registrado en mayo.

En la comparación frente a junio de 2015, los productos derivados del petróleo y biocombustibles bajaron 13,2 por ciento. También cayeron los productos alimenticios (-3,3 por ciento), productos de metal (-12,7), insumos para la construcción (-9,9), autos, remolques y carrocerías (-4,3) y otros equipamientos de transporte (-18,5). El sector metalúrgico se redujo un 3,6 por ciento, mientras que equipos de informática, electrónica y ópticos, 8,2 por ciento. Maquinaria y equipamiento bajó en el mes 2,9 por ciento y muebles lo hizo en un 9,8 por ciento. Dos de los pocos sectores que subieron fueron productos químicos (2,3) y marroquinería, artículos para viaje y calzados (8,9 por ciento). La oficina de estadísticas de Brasil informó que en el primer semestre 23 de las 26 ramas económicas registraron caídas. Fueron 64 de 79 grupos económicos y el 73,3 por ciento de los 805 productos del índice. Las mayores bajas se observaron en el sector primario (-14 por ciento) y en la industria automotriz (-21,2 por ciento).