ECONOMíA
Duhalde le pidió a Krueger que “deje de joder”, pero en guaraní
Rompiendo los libretos, Duhalde disparó contra la número 1 del FMI, desde Asunción. Krueger había pedido más superávit fiscal.
Apelando al humor, Eduardo Duhalde rompió todos los libretos. Le pidió a Anne Krueger que “deje de joder” con sus reclamos por más superávit fiscal al gobierno de Kirchner, aunque, por las dudas, lo hizo en guaraní. “La directora del FMI, Anne Krueger, nos hizo una recomendación en el día de ayer (por el sábado). ¿Qué nos dice? Que tenemos que prepararnos para evitar las turbulencias y yo quiero decirle en guaraní anive re jodé (dejate de joder)”, disparó Duhalde, durante su intervención, en Asunción, en el II Encuentro de Presidentes de Poderes Legislativos del Mercosur.
Duhalde, que desempeña la presidencia de la Comisión Permanente del Mercosur, fue incluso más allá. Y continuó bromeando con la expresión. Dijo que no iba a “traducirla porque en España pueden creer que es una recomendación en materia sexual”.
En los últimos días, aprovechando los actos de la Asamblea de primavera del FMI y el Banco Mundial, Krueger machacó en sus declaraciones con la recomendación de que la administración Kirchner acepte elevar las metas de superávit fiscal para los años 2005 y 2006 por arriba del 3 por ciento del PBI. La número uno interina del Fondo pretende, además, que el Gobierno destine buena parte del excedente fiscal que habrá este año por encima de lo acordado con el organismo –unos 5 mil millones de pesos– para mejorar la oferta de pago a los acreedores privados. Y, como siempre, acompañó esos “consejos” con una advertencia: palabras más o menos, dijo que había que aumentar el ahorro fiscal para prevenir turbulencias futuras.
Kirchner y Lavagna, cada uno por su parte, le contestaron que el Gobierno no se movería de la meta del 3 por ciento. Y que los recursos “sobrantes” de este año se asignarán para financiar el aumento de jubilaciones, obra pública, y la reducción del impuesto al cheque.
Haciendo causa común con el Presidente, cuando la relación entre ambos atraviesa por una etapa difícil, Duhalde fue mucho más audaz en su respuesta.
“¿A qué turbulencias se refiere esta señora?”, se preguntó Duhalde ante los representantes de los parlamentos del Mercosur. “¿A las de Bolivia?, que hace poco tiempo, cuando, en medio de un crisis tremenda, le dio un consejo extraordinario: que había que bajar las jubilaciones, los salarios y aumentar los impuestos”, retrucó. Así responsabilizó al Fondo por la profunda crisis institucional que estalló en octubre del año pasado en el país andino y que llevó al entonces presidente del país, Gonzalo Sánchez de Lozada, a renunciar.
Duhalde aseguró, además, que “como nos va bien (a los argentinos) los funcionarios del Fondo aparecen como aves de rapiña”. “Y tenemos que pagar más, sin darse cuenta de que ese pagar más inmediato puede significar que no podamos pagar en el futuro y que no crezcamos como debemos crecer”, agregó. Por si fueran pocos palos a Washington, sugirió “un poco de cordura” y recordó las críticas del director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Jaques Diouf. “Lo dice el director general de la FAO: los que están sentados en el directorio del FMI son esos países que subsidian producción y comercialización”, afirmó Duhalde. Y remató: “Estos países son parte fundamental de lo que nos ha pasado (en Argentina)”.
Por otro lado, el secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, confirmó ayer, desde Nueva York, que la propuesta final para la renegociación de la deuda con acreedores privados recién estará lista para junio. Nielsen mantuvo ayer reuniones con representantes de los tres bancos extranjeros (Merrill Lynch, UBS Warburg y Barclays) que asesoran a la Argentina en la renegociación de la deuda.