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Por tercer día consecutivo, el dólar cerró ayer en el escalón de los 3 pesos. Exactamente, a 3,005 para la compra y 3,03 para la venta. Los operadores financieros suponen que se mantendrá en ese nivel por algún tiempo. Y aunque descartan movimientos bruscos, esperan un ligero deslizamiento ascendente. De hecho, el mercado de futuros Rofex finalizó a 3,036 para agosto, 3,052 para septiembre, 3,095 para fin de año y 3,15 para fines de marzo.
En este momento una de las razones que explica la suba es la menor liquidación de divisas por parte de los exportadores, lo que coincide con una tendencia ligeramente alcista de la demanda. El precio de ayer del dólar fue el más alto de los últimos 17 meses. Pero el mercado sabe que la suba llegará hasta donde quiera el Banco Central, que tiene reservas suficientes como para manejar el precio de la divisa.
A la caída de las liquidaciones de los productores rurales, por una cuestión estacional, se suma que los productores de soja están reteniendo la cosecha a la espera de una recuperación del precio internacional. Eso disminuye también la oferta en el mercado. Por el lado de la demanda, bancos y empresas compraron algo más luego de que se confirmó que el FMI retrasará hasta septiembre la revisión del acuerdo con la Argentina. Por otra parte, el euro se apreció respecto del dólar tras la difusión de indicadores económicos de Estados Unidos que estuvieron por debajo de las estimaciones del mercado. Así, la paridad entre esas dos monedas quedó en 1,2066 por unidad en Londres. En las casas de cambio porteñas se ubicó en 3,62/3,67 pesos. En sintonía con la evolución del dólar, el mercado accionario viene repuntando esta semana, ya que el valor de las empresas se mantiene en términos de esa moneda. El MerVal cerró con un alza del 1,5 por ciento.