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Después de una semana en la cual permaneció inamovible, la cotización del dólar volvió a subir. Ayer terminó a 2,68 pesos para la compra y 2,78 para la venta, tres centavos por encima al último cierre en aquellas operaciones “por cuenta y orden del Central”. Sin las filas largas de semanas anteriores, la actividad en la city fue más intensa. De hecho, y a pesar de que se detectaron liquidaciones por parte de exportadores, el Banco Central inyectó 25 millones de dólares en el mercado minorista, un monto superior a los 10/15 millones colocados en la última semana. En el “mercado libre”, la moneda estadounidense finalizó a 2,86, en línea con las últimas jornadas.
La suba del dólar ofrecido por el Banco Central, aunque de tan sólo el 1,1 por ciento, dio cuenta del nerviosismo que existió entre los operadores desde las dos de la tarde. A partir de ese momento hubo rumores en la plaza financiera referidas a que la entidad monetaria dejaría su estrategia de vender dólares “por su cuenta y orden”, una versión que había existido anteayer y que la propia entidad desmintió. Pero ayer fue el propio BCRA el que convalidó dichas presiones del mercado y elevó el precio del dólar, que pasó de vendérselo de 2,70 a 2,73 a las entidades financieras que adhirieron a la operatoria. Estas agencias de cambio y bancos se lo venden al público con una diferencia de cinco centavos.
El hecho que confundió a algunos financistas fue una circular emitida por el BC en la cual se dispuso que los bancos podrán vender hasta 10 mil dólares a sus clientes, pero poniendo el límite de una cuenta por cliente y a un titular por cuenta. Es decir, si una cuenta corriente figura a nombre de dos personas, sólo una de ellas podrá adquirir billetes. Otra medida restrictiva tomada por el Central refiere a que los empleados bancarios podrán destinar sólo la mitad de su sueldo a la adquisición de dólares. En caso de que estos límites se excedan, las entidades financieras tendrán que vender dólares de su propia posición en divisas.
En este contexto, el BC volvió a colocar Letras. Esta vez fueron nominadas en dólares. En la serie a 14 días de plazo, la tasa de interés pactada fue del 9,99 por ciento anual, mientras que en la licitación a 28 días, el costo trepó al 39,8 por ciento. En total se colocaron bonos por 17,5 millones de dólares (8 millones a 14 días y 9,5 millones a 28). La tasa de la anterior operación a 15 días en divisa había resultado del 2 por ciento anual, el pasado 22 de marzo.
Respecto de las acciones, el índice MerVal registró una baja del 1,8 por ciento. La caída se explicó por la importante baja del papel del BBVA Banco Francés (-7,6 por ciento) debido a las investigaciones judiciales abiertas en España por supuestas cuentas secretas de la entidad financiera. En total se operaron 38 millones de pesos.