ECONOMíA
La inversión no es un gasto
El Comité de Desarrollo del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional terminaron atendiendo un reclamo del gobierno argentino. La entidad pidió un aumento de la flexibilidad en las cuentas fiscales del Estado, para realizar inversiones en infraestructura “dentro de los límites de la prudencia fiscal”.
“Para asentar las bases del crecimiento es clave que muchos países den respuesta a sus grandes necesidades de infraestructura”, dijo el comité conjunto al final de su reunión de ayer. El comunicado final remarcó la necesidad de “incrementar el espacio de maniobra fiscal para las inversiones públicas de infraestructura, dentro de los límites de la prudencia fiscal y la sostenibilidad de la deuda”.
Tanto Argentina como Brasil propusieron que ciertas inversiones del Estado no sean tratadas como gasto a la hora de calcular el déficit sino como inversiones permanentes. Con el comunicado de ayer, el FMI parece haber dado cabida a la idea. La entidad realiza actualmente un estudio sobre cuál sería el impacto de esta medida.
Otro órgano conjunto de las dos entidades financieras internacionales, el Comité de Desarrollo, también urgió en su comunicado de ayer un avance en las negociaciones para la liberalización de los intercambios comerciales que se llevan a cabo en la Organización Mundial de Comercio. “Enfatizamos la importancia de trasladar los recientes marcos alcanzados en la OMC en resultados tangibles”, dice el documento, señalando el acuerdo logrado en julio sobre eliminación de barreras al comercio en la agricultura y de los masivos subsidios europeos que distorsionan el intercambio. El Comité analizó el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo del Milenio, a ser alcanzados para 2015, entre los que están reducir la pobreza a la mitad.