ECONOMíA
La AFIP clausuró el Hilton porque no anotó que no andaba la registradora
La sanción por una infracción formal le significará al afamado hotel no poder recibir nuevos huéspedes por tres días y a la AFIP dar la sensación de ser implacable, justo antes del vencimiento de Ganancias.
La elegante fachada de vidrio del hotel Hilton de Puerto Madero luce desde ayer tres carteles rojos con letras negras que dicen “clausurado”. Fueron pegados por siete inspectores de la AFIP y estarán allí hasta mañana a la noche, cuando se levantará la medida y la cadena británica podrá aceptar nuevamente el ingreso de pasajeros que no tengan reserva. La sanción, que se complementa con una multa de apenas 300 pesos, es por una omisión de registración que cometió el hotel en diciembre de 2002. En aquel momento, el organismo recaudador no pudo avanzar con la clausura porque la empresa apeló ante la Justicia. El insólito caso llegó hasta la Corte Suprema y terminó recién este mes con un fallo favorable a la AFIP. A la entidad el caso le sirve para generar “percepción de riesgo” cuando se acerca el vencimiento del impuesto a las Ganancias.
A pesar del remolino de periodistas, fotógrafos y camarógrafos, sumados a los siete inspectores encargados de la clausura, los turistas y hombres de negocios hospedados en el Hilton, en su mayoría estadounidenses, no vieron alterado su tranquilo pasar por las instalaciones del establecimiento. La medida no tiene para ellos ninguna consecuencia. Las fajas de clausura, de hecho, están pegadas en una puerta lateral de poco uso. Durante el fin de semana, el Hilton no puede recibir nuevos pasajeros que lleguen sin reserva –lo que ocurre excepcionalmente– ni aceptar nuevas reservas.
La infracción que motivó las sanciones fue cometida hace más de dos años. El hotel no utilizó el controlador fiscal para facturarles a sus clientes, sino que lo hizo en forma manual y omitió registrar esas operaciones en sus libros. No es un caso de evasión, pero sí una incorrección fiscal, aclaró el jefe del operativo de clausura, Hugo Rodríguez. “No se pueden usar facturas manuales. El controlador fiscal tiene una memoria interna que le permite a la AFIP leer esas operaciones en cualquier momento. Si se realiza en forma manual se está interfiriendo en esa toma de datos”, agregó el inspector, quien indicó que la sanción más importante es la clausura, mientras que la multa se limita a 300 pesos.
Por su parte, el gerente general del hotel, el chileno Patricio Alvarez, leyó un comunicado en el que admitió que “el error formal consistió en no registrar en el libro de los controladores fiscales fallas producidas en los sistemas informáticos”. Dijo que “en el último trimestre del 2002, a raíz de la falta de energía eléctrica se produjeron caídas del sistema contable que nos obligaron a la emisión de facturas manuales”. Reconoció que “esta emisión no fue detallada en los libros de los controladores fiscales. El error se presentó en 15 facturas de las más de 130.000 que emite el hotel por año” y que “se trató de un simple error formal sin perjuicio fiscal”.
Al preguntársele si el hotel cuenta con grupo electrógeno para salvar un corte eléctrico, Alvarez dijo que sí, pero admitió que en aquella ocasión “hubo una falla” y explicó que “el sistema, por cuestiones de protección de información se detiene y hay que hacer toda la recuperación”, expresó. El ejecutivo precisó que la facturación involucrada en esas operaciones fue de “aproximadamente 100 mil pesos”. “Nosotros reconocemos que hubo error formal y no de fondo porque no hubo evasión”, remarcó.
La repercusión del caso le permite a la AFIP generar “percepción de riesgo”, según dijeron desde el organismo, para reforzar la campaña de cobro del impuesto a las Ganancias.