Como una prueba de que su gestión es capaz de honrar las promesas, el gobernador Sergio Acevedo anunció ayer que ya fueron repatriados 403.299.758 dólares del polémico paquete de recursos que hace más de una década depositó en el exterior Néstor Kirchner, cuando era responsable de la administración santacruceña. Parte de esos recursos están depositados en el Banco de Santa Cruz SA, que en un 49 por ciento pertenece a ese Estado sureño. Una parte del dinero sigue todavía en el Credit Suisse, bajo la forma de plazos fijos y bonos. El reingreso de este dinero fue formalmente habilitado a mediados del año pasado mediante un decreto que generó grandes expectativas acerca de cómo y cuándo se concretaría ese retorno, muy exigido por la oposición.

La noticia se supo en boca de Acevedo durante la apertura del período ordinario de sesiones de la Legislatura provincial e incluyó un detalle al 31 de diciembre del destino de los dólares alguna vez expatriados. El gobernador santacruceño aclaró que a esa fecha se habían depositado en cuenta corriente en el Banco de Santa Cruz, en bonos a valores nominales, la suma de 119,094 millones de dólares; otros 38,850 millones están en la misma entidad, pero en un fideicomiso destinado a la construcción de una planta de elaboración de cemento en Pico Truncado. A esos importes se suman 394,9 millones depositados “en una cuenta del Credit Suisse, que incluye plazos fijos y bonos”.

“Todo suma 552.570.987 dólares, que conforman los ahorros que la provincia ha custodiado celosamente durante una década y media, porque constituyen la garantía de un futuro previsible para las próximas generaciones”, defendió el funcionario provincial. Tiempo atrás fue el propio Kirchner quien salió públicamente a defender la decisión que él mismo tomó en su momento de girar al exterior un botín acumulado por el cobro de regalías, más la venta de acciones de YPF. Lo hizo poniendo en duda la honestidad de algunos periodistas que sugerían falta de transparencia en el manejo de esos recursos públicos.

La decisión política de traer ese dinero al país fue anunciada el año pasado, después de que la Argentina concretó el canje de gran parte de la deuda pública defaulteada. Pero la concreción de ese propósito es paulatina y, según explican las autoridades provinciales, sólo puede hacerse superando algunos escollos legales y técnicos.

Durante el año pasado, parte del dinero repatriado se destinó a la compra de Boden en dólares emitidos por la Nación, con lo cual la administración santacruceña brindó cierto auxilio a la Nación. Según una norma provincial de agosto pasado, el dinero que se traiga tendrá carácter “extrapresupuestario”, lo que confiere mucha más libertad a la gobernación para disponer de él. La aludida norma contempla que el dinero podrá utilizarse para la implementación de “todas las políticas y proyectos que propendan al desarrollo económico y social, y/o a ejecutar obras de infraestructura de cualquier tipo”.