La Argentina “necesita un shock de inversiones” para el año que viene, que le permita descomprimir las tensiones de precios, genere empleo y mejore la situación social. Así lo explicó la ministra de Economía, Felisa Miceli, y agregó que “la inversión genuina es lo único que genera empleo y mejora la situación social”.

La titular del Palacio de Hacienda destacó que para avanzar en la etapa de captación de inversiones, que permita profundizar el crecimiento económico con inclusión social, “se va a ir profundizando el superávit fiscal y externo, que son los que dan pie a las políticas de crecimiento”.

“El crecimiento que se está dando es difundido hacia todos los sectores y todas las regiones, a diferencia de lo que ocurrió en años anteriores, que estaba empujado por un determinado sector”, sostuvo la ministra. La jefa de la cartera económica destacó que “hubo mucho tiempo en que creíamos que por tener un buen indicador de crecimiento las cosas estaban bien, pero en paralelo aumentaban la pobreza, el desempleo y cerraban empresas”.

“Hay que mirar otros resultados que tiendan a mejorar la calidad de vida, con inclusión social y reducciones de los niveles de pobreza e indigencia”, expresó la funcionaria. Miceli destacó la necesidad de atraer mayores inversiones y de mejorar las exportaciones, tanto en cantidad como en calidad, dotándolas de mayor valor agregado.

La ministra consideró que “es fundamental reavivar el proceso de inversiones (...). Una mayor inversión permitirá un acompañamiento de la oferta y la demanda y permitirá superar las tensiones en los precios”, sostuvo. La funcionaria señaló que las inversiones deben tener “tasas de rentabilidad razonables, financiamiento adecuado y contar con calidad de recursos humanos”. “La inversión genuina es lo único que genera empleo y mejora la situación social, porque da pie a un círculo virtuoso, que permite mayores remuneraciones y mejor calidad de vida para la población.”

La ministra también se refirió a la necesidad de que crezcan las ventas argentinas al exterior, puesto que “el precio promedio de las exportaciones es de 463 dólares por tonelada, mientras que el de las importaciones es de 1540 dólares”. “En materia de exportaciones, la Argentina tiene que hacer un esfuerzo enorme en cuanto a cantidades y para aportar mayor valor agregado”, destacó la jefa del Palacio de Hacienda.