Jueves, 10 de mayo de 2007 | Hoy
El Gobierno busca captar 750 millones de dólares en el mercado mediante la colocación de un bono a diez años. En el ámbito bursátil descuentan que logrará hacerlo a un costo más bajo.
Por segunda vez en un mes, el Gobierno saldrá a colocar un bono en dólares a diez años de plazo (Bonar X). A diferencia de la vez anterior, en esta oportunidad cuenta con un escenario financiero favorable. Ayer, la Reserva Federal (banca central estadounidense) mantuvo la tasa de interés en el 5,25 por ciento anual, una decisión que fue acompañada con resultados positivos en los principales recintos bursátiles internacionales. En este contexto, en la city porteña estiman que Economía logrará financiarse a un costo más bajo.
La operación de esta tarde será por un monto máximo de 750 millones de dólares. Ese fue el monto colocado en la operación del 12 de abril pasado, a una tasa de interés del 8,46 por ciento anual. Ese costo fue más elevado al esperado por los funcionarios. En aquella oportunidad, el clima financiero estaba convulsionado porque se especulaba con que la Reserva Federal no sólo no bajaría la tasa de interés, sino que, incluso, había chances de que la elevara. Esa posibilidad se fue disipando con los últimos datos económicos estadounidenses, que dan cuenta de un enfriamiento de la actividad. No obstante, la FED volvió a sugerir en su comunicado de ayer que “la inflación núcleo (no toma en cuenta los rubros más volátiles: energía y alimentos) permanece elevada”.
En el microcentro porteño estimaban ayer que Economía conseguiría alrededor de una décima menos que un mes atrás, en torno del 8,35 por ciento anual. Pero que la diferencia podría ser mayor en caso de que en lugar de colocar 750 millones de dólares se adjudique un volumen menor. Esta colocación le servirá a Felisa Miceli para ir completando las necesidades financieras del año, que a esta altura ascienden a unos 2000 millones de dólares.
El contexto financiero internacional luce positivo para la colocación de papeles de la deuda. Esa impresión quedó reivindicada ayer, tras el comunicado de la FED, cuando tanto en Wall Street como la bolsa de Brasil y la de Chile quebraron niveles record. Por su parte, el índice de acciones líderes MerVal trepó 1,1 por ciento. El consenso en el mercado es que la FED mantendrá el actual nivel de la tasa hasta fin de año.
Este escenario favorece la liquidez financiera. El Banco Central volvió a intervenir con fuerza para sostener el tipo de cambio. Adquirió 125 millones de dólares y las reservas treparon a 39.235 millones. La presión vendedora del sector exportador colocó finalmente la cotización del dólar por debajo de los 3,08 pesos en el segmento mayorista. Exactamente en 3,0779 pesos. En las casas de cambio, la cotización quedó en 3,10 pesos, pero en las agencias no descartan que baje un centavo en las próximas jornadas. La liquidación de la cosecha gruesa y el ingreso de divisas por parte de inversores financieros prevén un mercado caliente en lo que resta de este mes y el próximo.
Hasta ahora, el Gobierno prefirió endeudarse en moneda dura. Sin embargo, este diario pudo saber que se está diseñando una colocación en pesos a tasa de interés fija, también a largo plazo, entre cinco y siete años. Una operación de ese tipo le permitiría al Gobierno, al Banco Central y a las entidades financieras contar con una referencia de tasa de interés para los créditos hipotecarios y para la inversión a tasa fija. El BID, de hecho, y a instancias del BC, ya acordó con un grupo de bancos prestar en pesos a tasa fija alrededor de 150 millones, dinero que será destinado a inversiones en la economía real.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.