ECONOMíA › POLEMICA POR EL ANUNCIO DE ECONOMIA PARA COMPRAR 0 KM
Los concesionarios están calientes
La posibilidad de comprar autos cero kilómetro con dinero atrapado en el corralito generó ayer confusión entre los concesionarios. El problema surgió porque Roberto Lavagna les había comunicado en una reunión que mantuvieron anteayer que se podrían utilizar los depósitos reprogramados para adquirir autos y maquinaria agrícola. Sin embargo, en el comunicado que entregó esa misma noche la cartera económica se anunció que los títulos habilitados para la operación son los Boden 2012, en lugar de los Cedros de los plazos fijos reprogramados. El malestar de los empresarios se agravó porque todavía no salió el decreto reglamentario. “Es la tercera vez que se anuncia la medida y después siempre pasa algo que la traba”, se quejó en diálogo con este diario un empresario automotor.
La Asociación de Fabricantes de Autos también prefirió ayer guardar silencio hasta tanto se publique la reglamentación de la medida. Estaba previsto un encuentro entre terminales, autopartistas y concesionarios que no se concretó ante la demora de Economía.
En concreto, el comunicado de Economía, hasta el momento la única información oficial, establece que la posibilidad de comprar autos y máquinas se restringe a los Boden 2012. Este esquema estará habilitado por 60 días. Economía informó que el mecanismo estará disponible hasta la utilización de un máximo de 300 millones de pesos en esos títulos. Los bonos serán tomados a su valor nominal, pero el interesado deberá ofrecer una combinación de bonos y dinero en efectivo por el bien pretendido. Tras la oferta, “se dará preferencia de adjudicación a quienes presenten la mejor combinación”, indica la resolución oficial, aunque aún no se precisó el mecanismo de licitación ni quién determinará cuáles fueron las mejores combinaciones.
En el Palacio de Hacienda indicaron que “desde el punto de vista fiscal, se espera que esta operatoria produzca una mejora en la recaudación no menor a los 150 millones de pesos” y estimaron que “el efecto reactivante del mercado interno automotor representará aproximadamente 16.000 unidades”. Sin embargo, los empresarios dicen que tal como está planteada la situación hasta el momento, se parece más a una acción de marketing que de una medida efectiva. Los concesionarios lo que quieren es que se pueda utilizar efectivamente plata del corralito y no bonos.
Por otra parte, Lavagna confirmó ayer que habrá una segunda fase de canje de depósitos reprogramados por bonos, que se iniciará “preferentemente” cuando se frene la salida de dinero por los amparos. “En el próximo canje habrá tanto una opción de bonos públicos como otra garantizada por los bancos”, precisó. Respecto de los amparos, Economía estudia posibles herramientas legales para evitar el drenaje de dinero por esa vía.
Otra medida que tomó Lavagna, aunque en este caso como responsable a cargo del Ministerio de la Producción, fue la apertura de una línea de financiamiento para las pymes por 20 millones de pesos. La iniciativa apunta a otorgar capital de trabajo para el desarrollo de micro, pequeños y medianos emprendimientos, con proyectos desde 25 mil a 250 mil pesos.
El plan busca financiar unos 150 proyectos de inversión. Los créditos serán a 3 años, con uno de gracia, y una tasa de interés del 50 por ciento de la tasa general de cartera del Banco Nación. El financiamiento será del 70 por ciento del proyecto presentado. La selección de las propuestas a ser asistidas privilegiará a las que apunten a la sustitución de importaciones y a las exportaciones.