Ahorristas atrapados por el corralito de 2001 y las medidas posteriores a la devaluación celebraron el fallo de la Corte Suprema que resolvió que los pagos a cuenta efectuados por los bancos por acciones de amparo deben ser tomados en “la proporción” que representaban en relación con monto original.

“Los depositantes acorralados y pesificados podrán cobrar la proporción del crédito que les resta percibir, sin tomarse en cuenta la cotización del dólar al momento que recibieron el pago a cuenta”, explicó el abogado Fabián Bergenfeld, quien patrocina a los ahorristas representados por el actor Nito Artaza.

“Los bancos no podrán plantear contra los damnificados las acciones de reintegro con las que amenazaban. Se agotó el único argumento que les restaba para negarse a cumplir con los fallos de la Justicia. La Corte puso fin a la parte del conflicto que permanecía no resuelta”, agregó.

Según el abogado, los bancos deberán ahora pagar a los ahorristas que aún permanecen atrapados en el “corralón” y la “pesificación”, cuya negativa motivó que los ahorristas demandaran al gobierno ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

El fallo de la Corte corresponde a la sentencia dictada en una demanda que Pablo Kujarchuk promovió contra el Poder Ejecutivo Nacional, pero establece un criterio que se aplicará desde ahora en casos análogos.

La resolución fue firmada por el presidente del Tribunal, Ricardo Lorenzetti; la vice Elena Highton de Nolasco y los ministros Carlos Fayt y Eugenio Zaffaroni. La Corte explicó que el mecanismo dispuesto obliga a los bancos a tomar los pagos parciales efectuados a los ahorristas “según la proporción que tales sumas representaban en relación al monto original del depósito, computando a este último efecto los valores en dólares, tanto respecto del depósito como del pago a cuenta”.