El Fondo Monetario Internacional felicitó ayer a Cristina Fernández de Kirchner por el triunfo electoral del pasado 28 de octubre y se mostró dispuesto a colaborar. “La vamos a ayudar para que continúe e implemente las políticas económicas necesarias”, aseguró Anoop Singh, director del Departamento del Hemisferio Occidental, sin aclarar a qué tipo de políticas se refería. “Ella es fuerte para solventar la economía argentina”, agregó en una conferencia de prensa realizada en Brasil, donde la entidad presentó el informe “Perspectivas Económicas de las Américas”. Allí se afirma que la inflación en Argentina “sigue siendo alta” y advirtió que el aumento del gasto público en la región pone en riesgo la sustentabilidad del crecimiento, en línea con sus tradicionales recetas ortodoxas.

Desde la devaluación, la relación del Fondo con Argentina ha sido muy conflictiva, sobre todo durante el gobierno de Néstor Kirchner, cuando se decidió cancelar toda la deuda con el organismo para no tener que aceptar las condicionalidades que suele imponer en cada renegociación. Pero Singh decidió evitar la confrontación y, además de felicitar a Cristina Fernández, sostuvo que “nuestras relaciones son buenas y estamos siempre en contacto con el gobierno argentino”.

En lo que refiere a la región, Anoop Singh advirtió que “si tenemos un choque combinado que afecta a la economía estadounidense y rebaja el crecimiento a menos de lo que hemos previsto, entonces la predicción de crecimiento para América latina podría caer hasta un 2 por ciento”.

El Fondo aseguró, por otra parte, que hay otros riesgos que amenazan la sostenibilidad de la actual expansión económica regional. “Estos se derivan de factores internos y externos, cuyo origen está en las recientes tendencias de aumento del gasto público y del crédito y en su sostenibilidad”, apunta el informe. “Concretamente, se pronostica que los superávit fiscal y externo se deteriorarán y se han registrado leves alzas de la inflación –exacerbadas por las subidas de los precios mundiales de los alimentos– a medida que la producción se ha aproximado a su nivel potencial”, afirma el organismo multilateral.

Para el conjunto de economías avanzadas se prevé que la inflación bajará al 2 por ciento en 2008, mientras que las proyecciones para los países en desarrollo y los mercados emergentes indican que los precios al consumidor subirán 5,3 por ciento en 2008, tras haber aumentado casi un 6 por ciento en 2007. Según el FMI, en Colombia y Uruguay el costo de vida aumentó en un contexto de “crecimiento sólido” y está aproximándose o superando el tope de las metas fijadas por el Banco Central de esos países. Mientras que en Chile, México y Perú, “si bien la inflación global se mantiene contenida, ha sido impulsada por encima de la meta por la inflación de los precios de los alimentos”, destaca el documento.

También se advierte con preocupación que la inflación en Bolivia haya aumentado a dos dígitos y que en Venezuela y Argentina siga en ese nivel. “Una reducción más profunda de la pobreza dependerá primordialmente de que la actual expansión económica persista en un contexto de inflación contenida y de que se rompa firmemente con la tradición de inestabilidad macroeconómica en América latina”, resaltó el organismo.