Los precios del petróleo continuaron ayer a la baja. En Nueva York, el barril de crudo para entrega en diciembre cerró a 63,22 dólares, un descenso de 93 centavos en relación con el viernes. Mientras que en Inglaterra, el barril cotizó a 61,41 dólares, una disminución de 64 centavos. Por otro lado, la soja operó en Chicago con alzas del 3 por ciento (327,72 dólares la tonelada). En Argentina, la molienda de soja descendió un 10 por ciento en septiembre, en comparación con el mismo período del año pasado, según fuentes de la Cámara de la Industria Aceitera. A pesar de este dato, la oleaginosa se comercializó en 750 pesos.

El mercado del petróleo, tanto en Nueva York como en Inglaterra, operó con volatilidad. Las cotizaciones cayeron incluso bajo los 60 dólares en Londres, por primera vez desde el 16 de marzo de 2007. A pesar de un pasaje esporádico por el terreno positivo, en el momento en que la Bolsa de Nueva York registraba también ganancias, la presión a la baja fue más fuerte. Las consecuencias de una desaceleración económica mundial sobre la demanda de petróleo conforman la principal preocupación de los inversores. En consecuencia, el anuncio de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, que indicó que podría reducir otra vez la producción si fuera necesario, no logró convencer al mercado.

En tanto, el mercado granario en Estados Unidos operó en alza. El poroto de soja subió un tres por ciento mientras que la harina de esa oleaginosa, para octubre, trepó 7,7 dólares (276 dólares). Mientras que el contrato de maíz con vencimiento en enero subió 12,50 centavos, a 3,8525 dólares el bushel. Por su parte, la Bolsa de Comercio de Rosario informó que el trigo cerró a 410 pesos la tonelada, el maíz a 310 mientras que la soja se pudo vender a 750 pesos. A pesar de estos aumentos, la Cámara de la Industria Aceitera señaló que los productores están reteniendo cosecha a la espera de mejores precios.