En la plaza cambiaria local, el euro se retrajo ayer seis centavos en las pizarras del microcentro, para ofrecerse a 4,76 pesos. El retroceso respondió a la caída que sufrió la moneda comunitaria respecto del dólar a partir de los temores que desató la información de un alto déficit de la economía húngara (ver aparte). Por su parte, la divisa estadounidense finalizó sin ajustes en su cotización, cerrando la semana en 3,94 pesos. El Banco Central apuntaló nuevamente el precio vendiendo dólares en el mercado mayorista. El stock de reservas se ubicó en 48.828 millones de dólares. En la Bolsa porteña, el índice Merval perdió 2,6 por ciento y los títulos públicos hasta 3,3 por ciento.

Las intervenciones de la autoridad monetaria combinadas en los distintos segmentos del mercado fueron una constante en la semana y permitieron acotar las fluctuaciones de la divisa. A una mayor demanda de parte de los bancos para cubrirse, por pedido de sus casas matrices, de los desequilibrios externos, se suma el parate en la liquidación de los exportadores de granos. Sobre el final de las cosechas de maíz y soja, que dejarán un volumen record de ingreso de dólares, los agricultores restringen la oferta en espera de mejoras en las cotizaciones. Según relevamientos difundidos ayer por la Bolsa de Cereales, de casi 55 millones de toneladas de soja que dejará la campaña, “49,6 por ciento está en manos de acopiadores o productores, que las guardan en los silobolsas o silos tradicionales”.

Por el lado de las acciones, el panel de empresas líderes se acopló a la suerte de las principales plazas mundiales. Entre las que más cayeron se encuentra Tenaris, con un retroceso de 4,4 por ciento. Este papel tiene una alta incidencia en la composición del Merval, lo que equivale a decir que explicó casi en su totalidad el rojo del indicador. La constructora de tubos sin costura se vio perjudicada por el recorte en el precio del petróleo (ver aparte). Acompañaron la tendencia el Grupo Financiero Galicia y el Banco Hipotecario, ambos con una baja de 3,9 por ciento. Del lado de los títulos públicos, el peor desempeño fue para los cupones atados al PBI, que acusaron una pérdida de 3,3 por ciento. Siguiendo entre los bonos que integran la oferta para los bonistas en el canje de deuda, el Discount bajó 1,6 por ciento y el Par 2,6 por ciento.