Al menos 25 personas murieron y cerca de 70 resultaron heridas ayer por la noche en un atentado suicida. El ataque fue realizado en una cafetería al nordeste de Bagdad. Según Ahmad al Tamimi, jefe de la policía de Balaz Ruz, entre las víctimas se cuentan tres mujeres y dos niños. El barrio donde el atacante suicida detonó su cinturón de explosivos está habitado por kurdos chiítas. La explosión fue el primer atentado grande en Irak desde principios de septiembre. La provincia agrícola de Diyala, donde está ubicada Balad Ruz, sigue siendo una de las más violentas del país, a pesar de que el número de atentados disminuyó desde 2008. Gobernada por la mayoría sunita, fue feudo de la red Al Qaida, que sigue estando presente aunque su influencia disminuyó con respecto al pasado.