EL MUNDO
Un espía y un apaciguador
En medio de la tensión creada por el relanzamiento de los programas nucleares norcoreanos, un avión espía estadounidense U-2 se estrelló ayer en la ciudad costera de Hwasong, Corea del Sur, aunque el piloto logró salvarse al eyectar su asiento (foto con sitio de la caída). Al menos tres personas que se encontraban en tierra resultaron heridas, según un portavoz del Ejército surcoreano, que añadió que la causa del incidente estaba siendo investigada. En Corea del Sur hay 37.000 soldados estadounidenses estacionados y las tensiones en la península han ido en crescendo desde septiembre del año pasado, pero el secretario de Estado norteamericano Colin Powell volvió a pulsar su habitual cuerda apaciguadora al afirmar ayer en el Foro Económico de Davos que su país no atacará a Corea del Norte.