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Fue la peor pesadilla para los extremistas hindúes que ayer viajaban en el oeste de la India en el tren Sabarmati Express, cuando una turba prendió fuego a cuatro de sus compartimentos y murieron carbonizadas al menos 57 personas, en su mayoría mujeres y niños. El premier indio Atal Behari Vajpayee, cuyo propio partido nacionalista es responsabilizado por muchos de alentar este tipo de violencia, canceló su viaje a Australia y condenó enérgicamente los hechos.
Cuatro compartimentos del Sabarmati Express fueron incendiados ayer por atacantes musulmanes, poco después de que el tren saliera de la ciudad de Godhra, provocando la muerte en carne viva a por lo menos 57 personas, en su mayoría mujeres y niños. Los que viajaban eran activistas hindúes que regresaban del norte de Ayodhya, donde se reúnen para la construcción de un templo sobre lo que fuera una mezquita musulmana –cuya destrucción había originado disturbios que dejaron más de 3000 muertos en todo el país–. Anoche Godhra fue puesta bajo toque de queda.
El diario Times of India citó a autoridades que dijeron que los hindúes radicales en el tren vociferaban slogans ultranacionalistas en la estación de Godhra. Esto habría derivado en un altercado con los musulmanes locales. Al parecer, una muchedumbre que había estado en la estación detuvo el tren poco después de que partiera de Godhra, y le prendió fuego. En uno de los vagones que quedaron totalmente quemados se encontraban 75 pasajeros. El canal de televisión Star News informó que en el tren viajaban 2500 miembros del Consejo Mundial Hindú, provenientes de la ciudad norteña de Ayodhya. En abierto desafío a una prohibición del gobierno, los fundamentalistas hindúes pretenden construir en Ayodhya un templo sobre las ruinas de una mezquita destruida por fanáticos hindúes en diciembre de 1992.
Vajpayee canceló su viaje a Australia y ordenó a las autoridades del estado de Gujarat que procuren tranquilidad y que actúen con mano dura contra los autores del ataque. Por su parte, un portavoz de las autoridades locales aseguró que no se descarta que el número de víctimas siga aumentando. La policía sospecha que los responsables del ataque incendiario son extremistas musulmanes, pero no era clara su filiación política. Además se informó que dos personas fueron acuchilladas en incidentes separados y que las turbas trataron de incendiar dos micros en Ahmedabad.