La petrolera Citgo, filial de Petróleos de Venezuela, y la senadora demócrata Mary Landrieu se aliaron para impedir que el Senado de Estados Unidos aprobara las sanciones contra funcionarios venezolanos presuntamente culpables de violaciones de derechos humanos. Citgo se quejó de que las sanciones podrían repercutir en la capacidad de la compañía de importar crudo a esta refinería de Louisiana, lo que podría traducirse en pérdidas de puestos de trabajo, según el diario online Politico. Las preocupaciones expresadas por la empresa finalmente hicieron que Landrieu, senadora por Louisiana, objetara que el proyecto de ley se aprobara por la vía rápida en el pleno del Senado antes de que los senadores se fueran el pasado viernes de vacaciones. La refinería de Citgo es la sexta más grande de Estados Unidos y emplea a unos 2000 trabajadores. Landrieu se presenta a la reelección en noviembre y recientemente se mostró preocupada por las repercusiones negativas que esta legislación pudiera tener en su Estado. El proyecto de ley, aprobado ya por el Comité de Relaciones de Exteriores del Senado, se encuentra a la espera de que el pleno de la Cámara alta le dé luz verde. pero el Senado ya no podrá aprobar las sanciones por la vía rápida.