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Por Patrick Cockburn *
Desde Najaf

Hubo un estallido de armas de fuego y las balas dieron contra la pared de una mezquita de domo verde en la ciudad de Kufa, justo frente a nuestro automóvil. Los disparos, probablemente de ametralladoras pesadas, provenían del otro lado del puente sobre el río Eufrates. Pueden haber sido los últimos disparos lanzados por los milicianos chiítas contra los 1400 soldados españoles en Irak antes de comenzar a retirarse. Por otra parte, la fuerza norteamericana atenuará el sitio a la ciudad de Faluja luego de que ayer arribara a un precario acuerdo con los rebeldes sunnitas.
Cuando comenzaron los disparos, estábamos viajando en el auto, junto a la pared blanca de la mezquita musulmana de Bin Akeel, camino a Kufa y nos dirigíamos hacia la ciudad santa de Najaf, a unos pocos kilómetros. Al principio oímos unos pocos disparos y luego el tableteo de las ametralladoras. Rápidamente nos alejamos del camino para ponernos a cubierto detrás de la mezquita. Por encima de nosotros, hombres armados vestidos de negro del Ejército de Mehdi (milicia chiíta), aferrando sus armas, corrían a lo largo del alto muro de la mezquita para disparar a quien fuera que nos estuviera disparando a nosotros. Un oficial, blandiendo una pistola, parecía estar gritándoles órdenes, pero no podíamos oír lo que decía. A nuestro alrededor, montones de peregrinos entraban en pánico. Habían estado marchando de a miles hacia Najaf para celebrar el aniversario de la muerte del Profeta Mahoma.
En teoría había una tregua de dos días en Kufa y Najaf ayer, declarada por Muqtada Al-Sadr, el clérigo radical que conduce el Ejército de los Mehdi, cuyos hombres armados, zaparrastrosos pero duros, tienen el total control de ambas ciudades. Dijo que el cese de fuego era para proteger a los peregrinos, muchos de los cuales estaban convergiendo al santuario del Imán Ali, en el centro de Najaf. Sadr también dijo que les había ordenado a sus hombres que no les dispararan a los españoles que partían. En cuanto al alto el fuego, considerando lo que es Irak hoy, la tregua de ayer fue suficientemente efectiva. Aparte de la lucha en el puente que presenciamos, el día estuvo calmo. Esto fue beneficioso, porque el centro de Najaf estaba repleto de peregrinos, totalmente expuestos a las esquirlas. Pero más tarde el Ejército de Mehdi declaró que había capturado a un Humvee, un gran vehículo cuatro por cuatro hecho en Estados Unidos de los españoles y dijo que lo iban a traer a la ciudad.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.