EL MUNDO › INEDITA ACUSACION EN ALEMANIA POR ABU GHRAIB
El torturador Donald Rumsfeld
Por Tony Paterson *
Desde Berlín
Prominentes abogados estadounidenses de los derechos humanos lanzaron ayer en Alemania un intento de procesar al secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld, por crímenes de guerra, en una movida que puede molestar seriamente al gobierno de coalición del canciller Gerhard Schroeder. Michael Ratner y Peter Weiss, del Centro de Derechos Constitucionales basado en Nueva York, dijeron que habían entregado evidencia al fiscal federal del estado de Alemania y le pidieron que presentara cargos contra Rumsfeld y otros altos funcionarios en conexión con las torturas practicadas en la prisión de Abu Ghraib en Irak.
Los abogados dijeron que Alemania ofrecía una de las últimas oportunidades para procesar a Rumsfeld. “La tortura en Abu Ghraib no ha sido adecuadamente tratada por los tribunales en Estados Unidos. Sólo los soldados directamente responsables han sido acusados”, dijo Ratner. “No existe forma de que nuestro caso se hubiera podido llevar allí”, añadió. “El objetivo de este ejercicio es asegurarse de que la gente que torture no tenga dónde esconderse. Estamos seguros de que los fiscales del estado en Alemania presentarán cargos y sostendrán los principios fundamentales que nos hacen humanos”, dijo. Agregaron que también estaban tratando de presentar cargos en Alemania contra el ex jefe de la CIA George Tenet y el general Ricardo Sanchez, el ex comandante en jefe de las FF.AA. de EE.UU. Su acción apunta a hacer uso de una ley alemana ratificada por ambas cámaras del Parlamento en 2002, que permite a los fiscales federales presentar cargos contra sospechosos de crímenes de guerra, tortura y abusos a los derechos humanos, independientemente de su nacionalidad o el lugar donde se cometieron los crímenes.
La oficina del fiscal federal estatal de Alemania confirmó ayer que había recibido la evidencia de los abogados de Estados Unidos. Cualquier decisión de presentar cargos contra Rumsfeld en Alemania pondría en una situación incómoda al canciller Gerhard Schroeder.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.