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El popular alcalde de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró ayer que firmará todos los documentos oficiales que sea necesario a pesar de la incertidumbre jurídica que existe en torno de la legalidad de su cargo luego de su desafuero. “Imagínense que fuera jefe de gobierno y no pueda firmar. No hubiese yo regresado, eso es simulación, un recurso leguleyo (tramposo), no voy a actuar de esa manera. Siempre actúo en función de mis principios y siempre doy la cara, no me gusta actuar con hipocresía”, dijo en rueda de prensa.
El lunes, los abogados del alcalde capitalino le recomendaron no firmar documentos oficiales, en tanto que la Procuraduría General de la República (PGR), que pidió su desafuero para procesarlo por desacato, y la presidencia han desconocido la legalidad de su regreso. “No voy a actuar de manera simulada, no tengo por qué optar por la simulación, tengo que actuar como lo que soy: el jefe de gobierno de la Ciudad de México”, afirmó. Explicó que el lunes firmó reconocimientos para policías y servidores públicos y que en estos días revisará asuntos relativos a obras viales y programas sociales.
Respecto de la posibilidad de entablar un diálogo con el gobierno federal para encontrar una salida negociada a su desafuero, López Obrador señaló que mientras el presidente Vicente Fox no se “rectifique”, todo acercamiento resulta imposible. “Se puede dialogar sobre cualquier tema”, dijo el vocero de Fox, Rubén Aguilar. “Si hay una propuesta formal (de López Obrador), con muchísimo gusto la tendremos que considerar”, declaró el portavoz, citado por el sitio del diario El Universal.
López Obrador reanudó sus funciones como alcalde de la Ciudad de México luego de 18 días de ausencia a raíz de su desafuero, el 7 de abril, por parte de la Cámara de Diputados para que responda por los cargos de desacato a varias órdenes judiciales que disponían detener la construcción de una vialidad. Candidato de izquierda y el mejor posicionado para los comicios presidenciales de 2006, López Obrador sustenta su legitimidad al frente de la alcaldía en el hecho de que la Corte Suprema admitió una controversia de la Asamblea Legislativa (Congreso de la capital), en la que desconoce las facultades de la Cámara de Diputados para retirarle el fuero constitucional y separarlo del cargo. En contraste, el máximo tribunal también aceptó una controversia en sentido contrario de Diputados.