EL MUNDO
Benedicto XVI visitó su casa
Como profeta en su tierra. Por primera vez, desde que fue elegido como Papa, Benedicto XVI viajó al extranjero y qué mejor lugar para hacerlo que a su ciudad natal Colonia, en donde la mitad de su población, alrededor de un millón de alemanes, se movilizaron para acompañarlo. La visita, que finaliza este domingo, tuvo como principal motivo la XX Jornada Mundial de la Juventud –creada por su antecesor, Juan Pablo II–. Benedicto XVI aprovechará, como parte de sus esfuerzos por continuar el acercamiento de la Iglesia con otras religiones, a visitar hoy una sinagoga. El presidente del Consejo Central de los Judíos en Alemania, Paul Spiegel, lo consideró un “acontecimiento histórico”, aunque también espera que el Papa use su influencia para luchar contra el antisemitismo, que según Spiegel, existe, al menos de forma latente, en un 20 por ciento de los alemanes.